Redacción (ALN).- La pensionista venezolana que la semana pasada ingresó de manera ilegal a Estados Unidos cuando cruzó, cargada en los brazos de otro emigrante, los bajos del Río Bravo, ya se reunió con su familia en el país norteamericano y está bien de salud, se informó este lunes. El medio local Caraota Digital publicó una imagen de la octogenaria, que responde al nombre de Irma Guillén de Duarte, en una silla de ruedas en lo que parece ser un hospital y rodeada de una mujer joven y una niña, que se presume son sus nietas.
Días después de que la mujer se entregara a las autoridades migratorias de Estados Unidos para iniciar su registro y, se presume, solicitar asilo, los familiares aseguraron que Irma está “bien de salud”.
El caso de Irma, que se hizo viral cuando el fotógrafo Go Nakamura de la agencia internacional de noticias Reuters registró su ingreso a Estados Unidos, volvió a poner de manifiesto la crudeza de la crisis que atraviesa Venezuela, un país del que más que cinco millones de personas han huido en los últimos años.