Elizabeth Fuentes (ALN).- La decisión de la funcionaria de deslindarse de la línea oficial generó aplausos de pie en los presentes. Tan pensada fue su decisión, que la llevaba escrita y la hizo difundir a través del Periscope del Ministerio Publico. Un minigolpe de Estado le dio la fiscal general de la República, Luisa Ortega Díaz, a la decisión del gobierno de Nicolás Maduro y su bufete particular, el TSJ, de arrebatarle los poderes a la Asamblea Nacional.
De hecho, se tomó la precaución de que sus palabras en VTV, el brazo comunicacional del gobierno, fuesen divulgadas también en vivo y directo por el Periscope del Ministerio Público, quizás temiendo que fuesen sacadas del aire o editadas en beneficio del gobierno.
En esa transmisión queda en evidencia que la fiscal planificó muy bien lo que iba a hacer y decir. De hecho, sus palabras calificando la decisión del TSJ como una ruptura del hilo constitucional y llamando a la reflexión y la rectificación, fueron escritas en dos folios separados del grueso informe de la gestión del Ministerio Público 2016, cuya lectura era la excusa para la convocatoria inicial.
Ovacionada de pie
Y tan sorprendente como su postura -aunque recientemente se rumorea mucho acerca de cierta distancia entre Ortega Díaz y el alto gobierno- fue que todos los presentes la aplaudieron de pie y la felicitaron al final, sin miedo a las cámaras ni a que sus cargos estén en riesgo.
Tampoco se puede ignorar las críticas veladas que dejó sobre la mesa, cuando señaló algunos tópicos “que son de urgente abordaje por parte de todas las instituciones”, como el desarme y la atención a la niñez.
“Tenemos que estudiar los efectos de las OLP, respetar la institucionalidad y atender las grandes necesidades y carencias que soporta el pueblo venezolano”.
La fiscal planificó muy bien lo que iba a hacer y decir
Se emocionó casi hasta las lágrimas, cuando trató de leer una parte del artículo 1 de la Constitución, asunto que los asistentes aplaudieron también, y que se refería a la soberanía y autodeterminación nacional.
Y, para concluir, lanzó el misil: “No solo como fiscal sino como ciudadana venezolana”. Esto fue esencialmente lo que dijo: “En las sentencias se evidencian varias violaciones al Estado de Derecho y a la Constitución Nacional, así como hay desconocimiento del modelo de Estado consagrado en la Constitución Nacional, lo que constituye una ruptura del orden constitucional… Es mi obligación manifestar al país mi alta preocupación por tal evento… llamamos a la reflexión para que se tomen caminos democráticos, que propiciemos un estado de respeto y de pluralidad, y podamos conseguir los caminos institucionales que garanticen la paz y superen los obstáculos para brindar la calidad de vida que reclama nuestra población”.
