Daniel Gómez (ALN).- Los opositores Juan Guaidó y Henrique Capriles aprovecharon este lunes para presentar su hoja de ruta contra el gobierno de Nicolás Maduro. Guaidó lo hizo a través del Pacto Unitario. Un documento suscrito por 37 organizaciones políticas que propone reactivar la presión en las calles. Guaidó también lanzó un reclamo a los militares, otro más. “Dejen de esconderse en las faldas del dictador”, dijo. Por su parte, Capriles llama a la lucha electoral. “La gente me dice: ¿otra vez? Sí, lamentablemente otra vez, no nos queda otra. Es un falso dilema votar o no votar. El dilema es luchar o no luchar”.
Unión es la palabra que mejor resume la ambición de Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela. “Unión no es unanimidad, es la mayoría ejerciendo con fuerza la política planteada en este momento”, dijo este lunes en el acto en el que presentó el Pacto Unitario.
El Pacto Unitario es un documento firmado por 37 instituciones políticas y un centenar de organizaciones civiles para “liberar a Venezuela” y “devolver a los ciudadanos su soberanía mediante elecciones libres, justas y verificables”. ¿Cómo lo harán? Se propone la siguiente estrategia:
– Reactivar la lucha en las calles. “Una gran movilización que genere la presión interna necesaria para generar el cambio”.
– Rechazar “el fraude”. Se refiere a las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre. Al rechazo se sumarán esfuerzos para “su deslegitimación dentro y fuera de Venezuela”. Guaidó también convocará una “Consulta Popular” para rechazar el fraude e insistir en elecciones libres y democráticas.
– Elecciones generales. Las elecciones no sólo tienen que ser libres y democráticas, sino que deben incluir todo el abanico político de Venezuela: presidente y parlamentarios.
– Un gobierno de transición. El equipo de Guaidó propone coordinar a políticos y civiles en una plataforma de unidad. Hecho esto, el objetivo será “sentar las bases de un Gobierno de Emergencia Nacional cuyo objeto sea dirigir la transición, atender de manera urgente la crisis económica y social, y convocar a elecciones libres”.
Para medir si la propuesta de Guaidó tiene respaldo habrá que esperar a este jueves. Para ese día convocó una marcha en apoyo a los trabajadores de la salud, a quienes les está concediendo un bono de 100 dólares usando el dinero recuperado en el exterior. Desde su equipo afirman que al menos 3.000 médicos y enfermeros han recibido esta ayuda.
La estrategia de Guaidó también incluye un elemento recurrente en los 17 meses de lucha política: el reclamo a los militares. “Dejen de esconderse detrás de las faldas del dictador, dejen de ignorar la realidad en Venezuela”, apuntó Guaidó. “Estamos dispuestos a sentarnos una vez más con quienes se necesitan para lograr una transición”.
Con esta última frase Guaidó se refiere a la Fuerza Armada, al Alto Mando. No a Nicolás Maduro. Y he aquí una de las grandes diferencias de su estrategia respecto a la de Henrique Capriles, excandidato presidencial.
La lucha que propone Capriles
En una entrevista concedida al diario El País este lunes, Capriles reconoció que “para que vuelva la democracia” a Venezuela “Maduro va a tener que hacer algo”. Ese algo es garantizar las condiciones para que las elecciones del 6 de diciembre sean creíbles.
La semana pasada, Maduro invitó a los observadores de la Unión Europea a vigilar el proceso electoral, perverso de antemano porque el Consejo Nacional Electoral fue elegido por el Tribunal Supremo de Justicia, designado por su gobierno, y no por la Asamblea Nacional, de mayoría opositora.
Aprovechando la invitación de Maduro, Capriles y un grupo de políticos afines están negociando con el régimen la participación de la Unión Europea en los comicios parlamentarios. Lo que ocurre es que los técnicos de la UE necesitan al menos seis meses de preparación y esto no se cumple si las elecciones son el 6 de diciembre. Capriles está intentando modificar la fecha de esos comicios, pero Maduro dijo este lunes que “llueva, truene o relampaguee” las elecciones presidenciales tendrán lugar el 6 de diciembre.
“Yo sé que Maduro ha dicho que llueva, truene o relampaguee habrá elecciones el 6 de diciembre. Él puede decir lo que quiera, pero no ha derrotado la pandemia. Y por encima de cualquier cálculo político, jamás una elección va a ser más importante que la vida de los venezolanos”, dijo Capriles a El País. “Mi opinión es que una situación como esta, con pandemia, con muertos, con un sistema de salud destruido, obliga a postergar la cita electoral”.
Para Capriles es clave conseguir la observación de la UE en los comicios. No para que él mismo participe en las elecciones. Sino para que otros que dudan del régimen lo hagan.
“Yo creo que la UE lo que debería hacer es evaluar la condición. Si dice que hay tiempo, es otro escenario político. No es que Capriles participe, es que muchos que hoy dicen que no, darán la pelea. Europa tiene hoy un papel histórico frente a la crisis venezolana”, apuntó Capriles. “Yo no sé si este proceso electoral, la búsqueda de ese hecho político, se va a lograr, pero tenemos que dar la pelea. La gente me dice: ¿otra vez? Sí, lamentablemente otra vez, no nos queda otra. Es un falso dilema votar o no votar. El dilema es luchar o no luchar. La gran pregunta es cómo se logra el cambio en Venezuela. No se logra por una acción militar que no viene, no va a venir y la mayoría de los venezolanos no desea que venga. Cuidado con las matrices de opinión, porque las grandes mayorías no entran en Twitter. Es lo que yo trato de visibilizar”.