Juan Carlos Zapata (ALN).- La oposición a Evo Morales y al MAS barre en Bolivia. Pero de cara a las elecciones de 2020, el bloque que evitaría el regreso del MAS y Evo Morales al poder está dividido. Esa oposición, cuando era oposición al gobierno, también le ganaba a Evo Morales, pero fue dividida a la primera vuelta de las elecciones del 20 de octubre. Y le ganaba en la segunda vuelta, unida, y eso fue lo que despertó los miedos de Evo Morales, y por ello cometió el fraude. Ahora, sin Evo Morales en el poder, ¿qué riesgos corre ese bloque otra vez dividido? ¿Y qué riesgos de que Bolivia pase del extremo de la izquierda al extremo de la derecha?
Las encuestas dicen, al menos la del diario Página Siete, que la suma de Marco Pumari, Luis Alfredo Camacho y Carlos Mesa, arroja un 46% de la intención del voto. Pumari y Camacho, líderes del frente cívico contra Evo Morales, aparecen empatados con 16% cada uno y Carlos Mesa, que fue el candidato que hizo el segundo lugar frente a Evo Morales, aparece con un 14%.
Este 46% de los tres candidatos del bloque que combaten a Evo Morales y al MAS son más que los 37 puntos que obtuvo Carlos Mesa frente al expresidente. Pero un punto menos que los 47% de Evo Morales en la polémica primera vuelta en la que se declaró ganador, cuando no era así.
El cuadro opositor puede inclusive complicarse más porque no se descarta que la presidenta interina, Jeanine Áñez, también lance su candidatura. De hecho, se especula que los movimientos que está ejecutando dentro del gobierno son para colocar gente de su extrema confianza pensando en la candidatura. Y es que Jeanine Áñez ha resultado ser toda una sorpresa en el manejo de los hilos del poder. A pulso, ha podido llevar a Bolivia a buen puerto.
Y queda el excandidato del Partido Demócrata Cristiano, Chi Hyun Chung, a quien la encuesta le brinda un 10%. El PDC dice que Chi ya no será su abanderado, pero declara que de todas maneras se lanzará.
Se revela un secreto: Por qué el general Williams Kaliman le sugirió la renuncia a Evo Morales
Este cuadro indica que el bloque antimasista y antievista supera el 50% de los votos. Que si lograra unirse en torno a una candidatura, la victoria sería en primera vuelta. De manera contundente. Lo cual sería beneficioso para la estabilidad de Bolivia. ¿Pero cuál de las tantas candidaturas será sacrificada? Cada uno tiene argumentos a favor.
Carlos Mesa dirá que fue él quien obligó a Evo Morales a cometer el fraude y que su base electoral es firme, ya contada.
Camacho dirá que fue él quien encabezó la protesta cívica y el primero que habló de renuncia.
Pumari argumentará una posición similar.
Jeanine Áñez dirá que es la presidenta, y es líder de la transición y que la Fuerza Armada ya confía en ella.
No aparece en el escenario un candidato dentro del MAS con la fortaleza de Evo Morales. No lo habrá en estas elecciones. El mejor posicionado es Andrónico Rodríguez. Es el vicepresidente de las seis federaciones del trópico de Cochabamba. La encuesta lo ubica con un 16%. Igual que Camacho, igual que Pumari. Mejor que Mesa, y esto ya indica mucho. Porque puede capitalizar a todo el movimiento, hoy un tanto desmoralizado, de Evo Morales, y forzar a una segunda vuelta si la oposición va dividida. El voto duro del MAS se calcula en un 40%.
Tal como se observa el escenario, hay tres frentes. Derecha, centro e izquierda. Camacho y Pumari son la expresión de la derecha. Y están divididos. Carlos Mesa es el centro, y su posición es distante a la de estos dos. Áñez puede encabezar otra expresión de derecha. La izquierda la representa el MAS de Evo Morales y Andrónico Rodríguez.
Jorge Richter, politólogo de Bolivia, declaró a la agencia Xinhua, que “Camacho y Pumari tienen importantes posibilidades de llegar al poder si logran unir a varias fracciones partidarias. No obstante, aún existen diferencias que impiden consolidar un solo bloque que les permita conseguir una victoria electoral en la primera vuelta”.
Richter señaló a Xinhua que “Mesa es el gran perdedor de las pasadas elecciones porque ahora debe enfrentar el voto que le restarán Camacho y Pumari y hay un riesgo de perder en departamentos donde había ganado”.
Estos son los 5 retos de la mujer que tiene en sus manos el destino de Bolivia
Señala la agencia china que “para el politólogo estos dos frentes que lucharon contra Morales se disputarán el 60% del electorado, pues cree que el restante 40% deberá ser revalidado por el Movimiento Al Socialismo (MAS), partido del dimisionario presidente Morales”.
¿Le conviene a Bolivia pasar de un extremo a otro? ¿De la izquierda de Evo Morales a la derecha de Camacho y Pumari? El experto chileno y profesor en la Universidad de Oldenburg, Fernando Mires, declaró al diario ALnavío que lo mejor que le puede pasar a Evo Morales es que Camacho sea presidente de Bolivia.
Mires considera que Camacho “es un peligro muy grande. No sólo representa una política extremista sino que parece la continuación boliviana de Jair Bolsonaro, como un misógino ultracatólico que da los discursos con un rosario en la mano. Fernando Camacho es el mejor candidato para que la gente empiece a llamar de nuevo a Evo Morales”.