Daniel Gómez (ALN).- Ni Sicad, ni Simadi, ni Dicom. La aseguradora española consideró que estos indicadores “no reflejan de forma adecuada” la inflación real de Venezuela. Por tanto, acudió al Fondo Monetario Internacional, estimando que sus índices sobre el tipo de cambio manifiestan mejor la situación financiera. El Grupo Mapfre recurrió a un estudio del Fondo Monetario Internacional (FMI) con el fin de calcular la inflación en Venezuela durante 2015 y 2016. El motivo fue la “poca representatividad” de los indicadores Sicad, Simadi y Dicom, con los que trabaja el Banco Central de Venezuela (BCV).
“Para los ejercicios 2016 y 2015 únicamente se ha considerado como país con economía hiperinflacionaria a Venezuela”, afirma Mapfre en el informe de cuentas consolidadas de 2016.
La aseguradora, con sede en España, se rige por las directrices de la Unión Europea. Por tanto, para ajustar las cuentas sigue la Norma Internacional de Contabilidad 29. Esta recomienda calcular la inflación de Venezuela a la misma fecha de presentación del informe, siguiendo para ello el índice general de precios.
Aquí reside el problema. Los indicadores, que facilita el Banco Central de Venezuela, “no reflejan de forma adecuada la situación real del país”. Por eso, Mapfre recurrió al FMI.
La inflación en Venezuela fue del 190% en 2015 y del 720% en 2016
En el primer semestre de 2015, la cotizada se guió por el Sistema Complementario de Administración de Divisas (Sicad): “Era poco representativo”, decían. Por tanto, pasaron al Sistema Marginal de Divisas (Simadi), creado en febrero de 2015. Y tampoco: “Existe una falta de conexión entre el Simadi y la situación real del país”.
El FMI como último recurso
La solución pareció llegar en 2016, cuando el Banco Central de Venezuela introdujo la Tasa de Cambio Flotante (Dicom, por sus siglas en inglés) con el fin de actualizar el Simadi. Pero, nuevamente, no valió: “No refleja de forma adecuada la situación financiera y patrimonial de las filiales venezolanas”, apuntaron.
Ante este panorama, Mapfre acudió al Banco Mundial. “El Grupo ha considerado que el tipo de cambio que mejor refleja la situación financiera debe basarse en la actualización del tipo de cambio del Simadi, tomando como referencia la inflación reflejada en el documento ‘Perspectivas económicas’ publicado por el FMI”, señala la cotizada en su informe.
Tomando como referencia al Fondo Monetario Internacional, la inflación fue del 190% en 2015, y del 720% en 2016. Los resultados en estos dos ejercicios fueron de 425,9 y 3.598,3 dólares estadounidenses a bolívares venezolanos.
“De haberse aplicado el Simadi en 2015 y el Dicom en 2016 el resultado hubiera disminuido en 23,49 millones de euros en 2016 y aumentado en 10,12 millones en 2015 (…) La mencionada reexpresión monetaria ha supuesto un incremento de 60,64 y 19,77 millones de euros en el patrimonio neto del Grupo al 31 de diciembre de 2016 y 2015, respectivamente”, concluye Mapfre en la memoria de cuentas.