Elizabeth Fuentes (ALN).- Uno de cada cuatro milenials sufre la violación de su “privacidad digital” por parte de su novia o novio. Le leen sin permiso sus mensajes de texto, sus chats, su correo electrónico o averiguan quiénes son sus nuevos amigos en Facebook. De acuerdo con dos estudios, uno llevado a cabo por la red YouGov y otro por Safe Home, las relaciones amorosas han sufrido un vuelco medular en este siglo, al extremo de que 26% de los estadounidenses confiesa haber roto con su pareja vía telefónica, mientras 33% de milenials terminó con su novia o novio a través de un SMS.
De acuerdo con la investigación de la red de investigación online YouGov (con presencia en Estados Unidos y buena parte de Europa), más de un tercio de los milenials leen los textos y mensajes de correo electrónico de su pareja sin permiso, un comportamiento que haría deducir que los jóvenes de esa generación son tan inseguros como todos. Un total de 22% de los adultos también confesó haberlo hecho.
El dato más interesante provino de la forma en que rompen sus relaciones amorosas. Si bien terminar con alguien en persona sigue siendo el método más común, 26% -en todas las edades- revela que ha roto por teléfono, mientras 14% ha finalizado la relación a través de un mensaje de texto. Una vez más, estos números se elevan cuando la consulta solo se dirige hacia los milenials, ya que un tercio de los encuestados, entre las edades de 18 y 34, ha experimentado rupturas por teléfono o por mensaje de texto.
“Amortiguación” es un nuevo término para nominar la infidelidad digital
Después del rompimiento, 44% de los adultos estadounidenses coincide en que las redes sociales les han hecho más difícil olvidar o ignorar a sus ex. Y en el caso de los milenials, 17% confesó que vigila el comportamiento de sus ex en las redes sociales al menos una vez a la semana. Y de los que han buscado a un ex, 46% admite haber tratado de averiguar la vida de su nuevo novio o novia.
En un estudio llevado a cabo en junio pasado por la firma de seguridad doméstica Safe Home, 15% de los millennials encuestados admitió que no usan dispositivo de seguridad para evitar alguna amenaza a la privacidad de sus comunicaciones digitales.
“Los milenials tienen menos expectativa de aislamiento digital que sus mayores y, quizás debido a eso, la privacidad parece importarles menos”, dijo el analista de eMarketer Mark Dolliver.
No es infidelidad, es una relación “backup”
Pero cada nueva actuación frente a los otros, es rebautizada en términos digitales. Por ejemplo, los milenials acaban de inventar el término “cushioning” (que se traduce por “amortiguación”) para referirse a la situación amorosa de alguien que tiene una pareja más o menos segura, pero mantiene a otra persona en la red -coquetean, se envían mensajes de texto, chatean, etc- en caso de que la pareja formal fracase.
Es una especie de copia de seguridad porque si la relación principal se cae, nadie se queda totalmente solo. El otro o la otra está ahí para “amortiguar” el golpe, por así decirlo. Basta volver a la App Tinder y encontrar allí esa nueva posibilidad de amortiguación, plan B o backup.
Dentro de esas nuevas tendencias a renombrar o inventar calificativos para sus relaciones, los milenials han incluido también los “fantasmas”, que son aquellas personas que gradualmente dejan de responder a los mensajes hasta que finalmente desaparecen. Y “breadcrumbing” (migas de pan) para mencionar a aquellos que siguen dejando huellas de esperanza a su paso.
“Es solo cuestión de tiempo antes de que haya una aplicación que signifique el lápiz labial revelador en el cuello. No debería sorprendernos si los milenials están revolviendo entre sí las comunicaciones privadas que quieren”, dice la reportera de eMarketer Monica Melton.