Redacción (ALN).- Más de 11.000 universitarios chinos participaron el pasado domingo en una masiva ceremonia de graduación en Wuhan, la capital de la provincia de Hubei donde, se estima, apareció el virus SARS-COV-2, que causa la covid-19. Pero no se sorprenda aún por la aglomeración de más de 11.000 jóvenes, porque hay más: el acto se celebró sin mascarillas y sin respetar el distanciamiento social, toda una proeza para la primera ciudad del mundo en ser arrasada por la covid-19.
El evento tuvo lugar más de un año después del levantamiento de las restricciones anti-covid en esta ciudad, que llegó a ser el epicentro de la epidemia.
La semana pasada, las autoridades estatales chinas anunciaron haber rebasado los 700 millones de dosis de vacunas administradas, pero la ansiada inmunidad de rebaño podría quedar lejos, si es que es posible.
Estudios científicos calculan que, incluso en el caso de que una población haya sido vacunada al completo, la tasa de eficacia del compuesto debería estar entre el 60% y el 71% para alcanzar esa inmunidad colectiva. No está claro que las vacunas chinas puedan alcanzan tales cotas.