Juan Carlos Zapata (ALN).- Por lo menos son cinco las consecuencias del error del presidente Duque en la ONU. Del error cometido con el informe sobre Maduro. El informe con el que iba a demostrar y a convencer a la Asamblea General de la ONU y al mundo de los nexos de Nicolás Maduro con el terrorismo. Pero el plan se vino abajo con las fotos que no corresponden a la presencia de la guerrilla y los grupos terroristas en territorio venezolano.
La polémica sigue abierta. Iván Duque había dicho en el discurso que pronunció en la ONU que “Mi gobierno tiene pruebas fehacientes y contundentes que corroboran el apoyo de la dictadura a grupos criminales y narcoterroristas que operan en Venezuela para atentar contra Colombia”. Pero cuatro fotografías le han restado fuerza al dossier de 128 páginas entregado por el mandatario de Colombia. Ya desde la ONU, el régimen de Maduro, por boca de la vicepresidenta Ejecutiva, Delcy Rodríguez, que intervino en la Asamblea General, señaló que “Un ligero examen ha demostrado que esas fotos que trajo como de Venezuela el señor Iván Duque realmente corresponden a territorio colombiano, en el caso del Cauca y en el caso del Catatumbo”. Para el propio Maduro, son falsos positivos. Y puso en duda la credibilidad de Iván Duque. El informe fue entregado al secretario General de la ONU, Antonio Guterres, y a los países que integran la ONU. Un especialista en inteligencia militar enumera para el diario ALnavío las cinco consecuencias de las fotografías del error.
Argumentos para Maduro y el poder chavista. Elementos para la ofensiva y el ataque. De hecho, Maduro no ha dejado de atacar a Duque en toda esta semana. Ha ironizado. Se ha burlado. Lo ha insultado. Maduro ha insistido sobre los falsos positivos que llevó Duque a la ONU, y este es el punto que le ha dado la vuelta al mundo. La “contundencia” de su informe ha quedado en segundo plano. O mejor dicho, el dossier es noticia para insistir en el error.
La primera. A estas alturas, el mundo debería estar hablando del Informe Duque. Pero hablando en el sentido de que la información disponible es contundente y confiable, puesto que así se confirmaba que Nicolás Maduro protege y alberga el terrorismo. De lo que se habla, en cambio, es de las fotos que no corresponden a la realidad. De lo que se habla es del error. De lo que se habla es de la renuncia del director de Inteligencia Militar. Y se habla de la improvisación. De la prisa. De las explicaciones que se dieron en un principio, que generaron aún más desconfianza. Se toma nota, además, de que Duque fue quien colocó en las redes sociales las primeras fotografías, y en ese grupo, la imagen que desencadenó el problema. Ello dice mucho del grado de improvisación. La fuente apunta que los reclamos de los equipos internos no terminarán con la renuncia del general, Oswaldo Peña Bermeo, ahora exdirector de inteligencia militar. Con toda seguridad, Peña no será el único en asumir los costos. Ya desde la Cancillería de Colombia había críticas hacia el equipo militar. Pero también se cuestionaba cómo se dejó en manos de unos lo que debía ser responsabilidad de todos, en vista de que se trataba de un asunto de enorme trascendencia. Se ve, dice la fuente, que el aspecto político prevaleció sobre lo técnico. Se quiso hacer más política que Inteligencia.
La segunda. Es que a pesar de lo que de ahora en adelante haga Duque para corregir el entuerto, lleva plomo en el ala. La corrección de este informe. O la elaboración de uno nuevo, tendrá una carga de desconfianza. Será mirado con lupa. Por los países. Por las organizaciones. Ese es un costo a pagar en el corto y mediano plazo. Desde el gobierno de Colombia han dicho que por los momentos se agregará un documento que aclare la situación. La interrogante es que no se sabe con certeza cuántas de las supuestas pruebas que confirman el dossier, no corresponden con la realidad. “Ya no hablamos de fotografías sino de otros elementos”, apunta la fuente.
¿Cuál fue el peor error de Iván Duque en el Dossier contra Nicolás Maduro?
La tercera. El error impacta sobre los aliados. La fuente se explica. Impacta sobre los aliados del Grupo de Lima. El aliado Estados Unidos. Todos ellos confiaron en lo que haría, expondría y consignaría Duque. El escándalo los afecta a todos. No sólo a Colombia. Nicolás Maduro ataca a Duque pero al mismo tiempo el ataque se extiende hacia los aliados. Y estos, tendrán bajo observación la capacidad de los equipos de Duque. La fuente señala que por lo general las fotografías de una agencia de noticias, como fue el caso del uso de al menos tres de AFP, pueden servir de referencia pero casi nunca como pruebas rotundas de un informe de Inteligencia. Se supone que los equipos de inteligencia, tanto civiles o militares, tienen un seguimiento de la zona, y poseen elementos probatorios, no sólo fotografías. De hecho, la primera fotografía de la polémica, fue tomada por Inteligencia militar, pero no en Venezuela sino en Colombia.
La cuarta. Argumentos para Maduro y el poder chavista. Elementos para la ofensiva y el ataque. De hecho, Maduro no ha dejado de atacar a Duque en toda esta semana. Ha ironizado. Se ha burlado. Lo ha insultado. Maduro ha insistido sobre los falsos positivos que llevó Duque a la ONU, y este es el punto que le ha dado la vuelta al mundo. La “contundencia” de su informe ha quedado en segundo plano. O mejor dicho, el dossier es noticia para insistir en el error. Maduro se relame y dice: “El imbécil de Porky, el imbécil de Iván Duque fue y presentó un documento y las fotos todas son falsas, como tienen que ser, porque la guerrilla es un fenómeno colombiano de 70 años”. Hay que fijarse que Maduro, puntualiza la fuente, dice “todas”, en el entendido de que la intención es descalificar la totalidad del informe. “Iván Duque en verdad da penita… Duque es el rey de los falsos positivos”, sentenció Maduro.
¿De verdad es contundente el dossier contra Maduro que Duque presentó en la ONU?
La quinta.- El error, como ya habíamos adelantado aquí en el diario ALnavío, opacó una buena semana de Guaidó. A Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional y Presidente Encargado de Venezuela, le había ido muy bien la semana pasada tanto en política interna como en política internacional. De hecho, Guaidó reivindicó en un video los hechos, cada punto obtenido en la escena internacional. Pero, la noticia no estaba allí. Estaba en los errores del Informe Duque. Estaba en aquellas fotos que ante la evidencia de la equivocación, los portavoces oficiales dijeron que se trataba de imágenes de “contexto”. La fuente se pregunta: ¿Dónde quedaba lo prometido? ¿Las pruebas contundentes y fehacientes?