Elizabeth Fuentes (ALN).- Casi le da la vuelta al mundo el tenor catalán para despedirse de su público. Con 70 años a cuestas y un triunfo sobre la leucemia, Carreras decidió abandonar el escenario con las botas puestas: el espectáculo “A Life in Music”, que cierra una vida dedicada al arte por más de 40 años. Apareció en Los Simpson y hasta fue personaje central de un capítulo de Seinfeld, una de las más exitosas comedias en la televisión de los Estados Unidos. Aunque para José Carreras semejante reconocimiento a su fama planetaria jamás podría compararse a que dos teatros en España lleven su nombre o que la Oficina de Correos de Austria haya emitido un sello en 2004, para conmemorar el 30º aniversario de su debut en el Teatro Staatsoper de Viena. Sin contar, obviamente, los centenares de premios, doctorados, homenajes y aplausos recibidos a lo largo de más de cuatro décadas entregadas al bel canto.
Carreras, Pavarotti y Domingo lograron que un aria de Puccini se vendiera tanto como Madonna
Con 70 años a cuestas y un triunfo épico sobre la leucemia, el tenor catalán decidió despedirse del escenario con las botas puestas: A Life in Music. Un espectáculo que ha recorrido medio mundo -solo el año pasado hizo 36 conciertos, desde China a Berlín, de Nueva Zelanda a Londres-, y para este año ya están planificados otros 26, cinco de los cuales se llevarán a cabo en el sur de América Latina: el 3 de junio se presentará en el legendario Luna Park de Buenos Aires y el 5 de junio le tocará a la ciudad de Rosario. De Argentina seguirá a Paraguay, donde el día 7 se presentará por primera vez en ese país, y de allí en adelante lo podrán escuchar el 11 de junio en Santiago de Chile y el 14 en Montevideo.
Cantar con las botas puestas
ALN / Mariana Zapata
En el espectáculo, Carreras hace un recorrido lírico por las obras que más le han influido, incluyendo en el repertorio algunos de los grandes éxitos de su época con Los Tres Tenores, el grupo que conformó junto a Plácido Domingo y Luciano Pavarotti para la apertura del Mundial de Futbol Italia 1990. A partir de allí, los tres cantantes penetraron el gusto masivo y lograron ventas millonarias en espectáculos y discos. El CD del show en Roma vendió 13 millones de copias y se calcula que el concierto que dieron en Los Ángeles en 1994, fue visto por un billón de personas en todo el mundo.
Algunos aseguran que fueron los responsables de que la relación del gran público con la música clásica se democratizara y cambiara para siempre. Otros piensan que fue una moda que no logró llevar más personas a la ópera, pero lo que nadie discute es que Plácido, Pavarotti y Carreras hicieron que un aria de Puccini se escuchara tanto como Madonna.
Parte de ese pasado se verá en el espectáculo mediante proyección de imágenes a gran escala de sus actuaciones junto a Monserrat Caballé, Kiri Te Kanawa o cuando protagonizó la versión fílmica de La Boheme.
En dos años el tenor se presentará en 62 ciudades
“Desearía regresar una vez más a todos los lugares del mundo en los que he actuado a lo largo de mi carrera. Esto es bastante imposible, pero al menos puedo intentarlo”, dijo a la agencia alemana DPA el año pasado, cuando presentó su concierto de despedida en Berlín. Allí aseguró que la gira mundial culminará en 2018, cuando se presentará en Viena, Nueva York, San Francisco, Milán, Tokio, entre otras ciudades. Un record más en la vida de un hombre que ha vendido más de 75 millones de disco a escala mundial, realizó más de 160 grabaciones y en pleno clímax profesional venció a la leucemia, un adversario más difícil que el público de La Scala de Milán.
