David Placer (ALN).- El consulado chavista en Austria aumenta la presión contra los venezolanos en ese país. El embajador de Guaidó, William Dávila, denuncia que los funcionarios cobran dinero en efectivo y sin factura para renovar los pasaportes. Es una escalada más en los servicios consulares chavistas que enfrentan serias dificultades para pagar a los empleados
El matraqueo diplomático alcanza cuotas máximas en Austria, un país con apenas un millar de venezolanos con residencia legal, pero donde el pasaporte venezolano tiene un valor mucho mayor que en cualquier otro país. El visado en Austria está condicionado a la vigencia del pasaporte. Si el documento está vencido, el visado expira de forma automática y los extranjeros pueden ser expulsados de inmediato.
Por eso, los venezolanos que residen en Austria tienen un problema apremiante con los pasaportes. Conocedores de la urgencia, la delegación consular, bajo el manto observador del embajador chavista Jesse Chacón, aplican cobros irregulares a los venezolanos que necesitan la renovación del documento.
Además de las tasas oficiales (72 euros por la renovación de pasaportes, según la web de la embajada), los venezolanos deben pagar desde 200 euros adicionales para la obtención del documento. Se trata de un dinero cobrado en efectivo sin recibo ni factura, según denuncia el embajador designado por Juan Guaidó en Austria, William Dávila.
El representante diplomático de Guaidó ha recibido numerosas quejas de los venezolanos que residen en Austria por el proceder de los servicios consulares. Se trata de una de las embajadas más hostiles contra sus propios ciudadanos. Quienes participan activamente en marchas y protestas tienen enormes dificultades para la renovación de documentos y la aprobación de cualquier tipo de trámite.
Embajadas enemigas
“Estamos descubriendo el funcionamiento de las embajadas enemigas. Consideran como adversarios y enemigos a los venezolanos que viven allí. Con el caso de los pasaportes, hemos visto chantajes increíbles. Desde 200 euros hasta cantidades mucho más altas. Los matraqueos también aplican para los que quieren obtener la nacionalidad austríaca. Para ello, debes renunciar a la venezolana. Y hay que pagar para obtener un certificado. Si has ido a actos contra la dictadura, te vetan. No pueden hacer nada. Le dicen: tu eres un enemigo”, explica el embajador de Guaidó, William Dávila, a ALnavío.
El representante diplomático designado por la Asamblea Nacional mantiene contacto permanente con los responsables de la cancillería austríaca que han sido designados como el canal oficial con los embajadores americanos. Es decir, Dávila trata directamente con la misma persona que mantiene el contacto con el embajador de Maduro, Jesse Chacón, o con el de Colombia, Chile o Canadá.
Ante la situación de “chantaje diplomático” del consulado chavista, el embajador de Guaidó ha pedido al gobierno austríaco analizar de forma detallada los casos de los venezolanos con residencia en Austria, con pasaporte vencido. “Hemos pedido que no haya expedientes de expulsión. Y hasta ahora, eso ha sido así. El gobierno austríaco ha accedido a estudiar cada caso de forma individual”, añadió Dávila.
El embajador de Guaidó ha pedido al gobierno austríaco que no abra expedientes contra los venezolanos con pasaportes vencidos por el “chantaje” de la embajada chavista
El embajador de Guaidó ha escuchado las quejas y denuncias de los venezolanos en Austria pero reconoce que, hasta ahora, no ha contado con las herramientas para denunciar los hechos. Los pagos cobrados en efectivo suponen una práctica fiscal irregular, pero la embajada rinde cuentas ante la Contraloría de Venezuela y no ante el fisco de Austria, según explica el embajador de Guaidó.
Los equipos de la embajada y el consulado de Venezuela en Viena apenas suponen unos 15 trabajadores, pero la plantilla, como en muchas otras sedes diplomáticas de Venezuela en el exterior, sufren serios retrasos para el cobro de las nóminas. “Es lógico que esos cobros estén destinados a sostener las actividades de la embajada y el consulado que tienen problemas de financiación”, explica Dávila.
Embajador itinerante
Además de ser embajador en Austria, Dávila también ha asumido las “embajadas” de Croacia, Eslovenia y Eslovaquia, con la dificultad de que este último país, aunque no reconoce a Maduro como presidente legítimo, tampoco reconoce a Guaidó. Dávila no lleva la vida de un embajador convencional. Vive en Madrid y viaja con frecuencia a Viena y al resto de países donde mantiene contactos con los gobiernos y trata temas que afecta a la pequeña comunidad venezolana en esos países.
Hasta ahora, ha participado en actos oficiales como los días de la Independencia de Canadá y Estados Unidos en Austria y a cenas diplomáticas con otros embajadores. Explica que todos los viajes, estadías y comidas son pagados de su bolsillo, con el sueldo que recibe del prestigioso Instituto de Empresa, en Madrid, donde trabaja desde hace varios años.
El hasta ahora canciller austríaco Sebastian Kurz, del partido demócrata-cristinano que reconoce a Guaidó como presidente interino de Venezuela, sufrió una moción de censura en el parlamento impulsada por los socialistas. Ahora, el país se encamina hacia unas elecciones que podrían cambiar el signo político del gobierno.