Redacción (ALN).- A partir de 2015, la temperatura del planeta no ha parado de anotar récords. Después de 2016 y 2019, 2020 es el tercer año más caliente de la historia de la Tierra. Lo cual “es un claro recordatorio de que el cambio climático avanza con paso firme, destruyendo a su paso vidas y medios de subsistencia en todo nuestro planeta”, dijo el secretario general de la ONU, Antonio Guterres.
En 2020 la temperatura media del planeta fue de 14,9 grados centígrados, 1,2º por encima de los registrados en los niveles preindustriales, informó la Organización Meteorológica Mundial.
Esto quiere decir que 2020 es el tercer año más cálido de la Tierra desde que hay registros, por detrás de los récords anotados en 2016 y 2019. Lo llamativo es que este indicador se anota en medio de un periodo de enfriamiento provocado por el fenómeno meteorológico de La Niña, que comenzó a finales del año pasado.
“Es notable que las temperaturas en 2020 estuvieran prácticamente a la par con 2016, cuando vimos uno de los eventos de calentamiento de El Niño más fuertes que se hayan registrado. Esta es una clara indicación de que la señal global del cambio climático inducido por el hombre es ahora tan poderosa como la fuerza de la naturaleza”, dijo Petteri Taalas, secretario general de la Organización Meteorológica Mundial.
En 2020 las temperaturas récord tuvieron efectos visibles para todos, como el acelerado derretimiento del Ártico y los incendios en Siberia.
También otros que no son tan palpables, pero que son igual de preocupantes, como las mayores concentraciones de gases de efecto invernadero, más calor y más pH en el océano, así como el aumento del nivel medio del mar, precisó la Organización Meteorológica Mundial.
Todo esto es un mal presagio de cara a lo que viene, porque como advierte el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, el mundo “va camino de alcanzar un aumento catastrófico de la temperatura”.
“La confirmación por parte de la Organización Meteorológica Mundial de que 2020 fue uno de los años más cálidos de los que se tiene registro es otro claro recordatorio del ritmo implacable del cambio climático, que está destruyendo vidas y medios de vida en todo nuestro planeta”, dijo Guterres.
“Ya somos testigos de fenómenos meteorológicos extremos sin precedentes en todas las regiones y en todos los continentes. Y nos dirigimos a un aumento catastrófico de la temperatura de 3 a 5 grados Celsius en este siglo. Hacer las paces con la naturaleza es la tarea definitoria del siglo XXI. Debe ser la máxima prioridad para todos, en todas partes”, concluyó.
De cara a 2021, desde la Organización Meteorológica Mundial esperan un descenso provocado por La Niña.
Este fenómeno tendría “efectos de enfriamiento continuos que pueden disminuir temporalmente la tendencia general de calentamiento a largo plazo durante el próximo año”, precisó el organismo.