Juan Carlos Zapata (ALN).- El expresidente del gobierno de España, José Luis Rodríguez Zapatero, considera que la Unión Europea debe mirarse en el espejo de los Estados Unidos. Esta potencia, dice, ante la crisis del coronavirus, “lo ha puesto todo encima de la mesa” al anunciar un plan de 2 trillones de dólares y liquidez ilimitada por parte de la Reserva Federal para estimular la economía. Allí, señala, se han puesto de acuerdo los partidos demócrata y republicano. ¿Qué pasa en Europa?
José Luis Rodríguez Zapatero fue entrevistado esta mañana en Radio Nacional de España. Analizó la crisis desatada por el coronavirus. Dijo que España se enfrenta a una situación inédita, también el resto del mundo. Señaló que ninguna generación de España recuerda una crisis de esta dimensión. Su papá, que tiene 93 años, y con quien estuvo hablando del tema este jueves, tampoco recuerda nada parecido.
-La crisis que estamos viviendo no la ha vivido ningún gobierno, con el paréntesis de la guerra civil. Seguramente ningún gobierno del mundo. Y ante este actor, un virus nuevo, la ciencia va con dificultad.
Señaló que hay que mirar la experiencia china, en referencia a cómo ha podido salir de lo más grave de la situación. Pero, claro, China a pesar de haber sufrido un antecedente, “aun así los primeros meses se vieron con dificultades y después fue que tomaron las medidas estrictas de confinamiento y alcanzaron el éxito”. Zapatero insiste. “Esto no se ha conocido nunca”, por ello demanda apoyo para el gobierno de Pedro Sánchez. “El país está dando lo mejor de sí mismo. Hagamos la tarea más fácil”.
El respaldo es fundamental porque luego de derrotar al virus viene la fase de la recuperación de la economía, y ello demandará un esfuerzo grande, ya que millones de personas irán al paro, muchas empresas se quedarán sin liquidez, y quedará allí el riesgo del rebote del virus. “Tengamos conciencia de la magnitud del desafío”, apunta, y coloca ese desafío en la siguiente dimensión: “Es un momento para hacer sobrevivir a un país como proyecto colectivo”.
El FMI reclama apoyo para la gente, las grandes y pequeñas empresas y las economías emergentes
Zapatero considera que los datos y las proyecciones apuntan a que Estados Unidos va a ser el país que sufrirá “el impacto más brutal”.
Y eso ya es un indicativo de la gravedad del problema. “Los sistemas sanitarios están colocados en un gran reto. No se había producido en nuestra era este fenómeno”.
Hasta el punto de que la considera “una batalla de más calado que el cambio climático. Tenemos 30 años debatiendo sobre el cambio. Y esto tiene 3 meses”.
El impacto también es económico. Y hacia allá hay que apuntar ahora. Por eso reclama respuesta rápida de la Unión Europea. Que no se repita lo que pasó en 2008. Era entonces presidente de España cuando explotó la crisis financiera mundial y hasta 4 años después no fue que la Unión Europea tomó acciones decisivas. Hasta con Grecia, señaló, se perdió tiempo. Pero esta crisis es más grave. El FMI ha dicho que la recesión de 2020 será peor que la de 2008. Por eso, Zapatero apunta que “esta crisis” demanda más urgencia. Y en tal sentido, el Banco Central Europeo es decisivo para la liquidez que se necesita.
-Ha puesto encima 750.000 millones de euros para esa liquidez. Eso es extraordinario. En 2008 no hubo una reacción tan potente. No la hubo sino hasta 2012. Y ahí comenzó la recuperación. Si lo sabré yo que tuve esa pelea con el Banco Central Europeo.
Apunta que “esta crisis urge mucho más”. Que ojalá sean dos semanas. Pero hace falta colocarse en un escalón de mayor consciencia. “Cuesta algo que uno se ubique en ese escalón a pesar de la rapidez de expansión del virus”. Sin embargo, señaló, hay tiempo si se produce una respuesta adecuada. “Habrá alguna respuesta imprescindible”. Y aquí es cuando compara lo anunciado en Estados Unidos con lo hecho hasta hoy por la Unión Europea.
-EEUU lo ha puesto todo encima de la mesa. Republicanos y Demócratas se han puesto de acuerdo para aprobar 2 trillones de dólares. Y la Reserva Federal ha dicho acción de liquidez ilimitada.
Entonces sentencia que si la UE no lo hace habrá iniciado un camino de no retorno de pérdidas, de autoridad, de liderazgo y fuerza. Aun así, señala, que “debo confiar” en que va a pasar.