María Rodríguez (ALN).- Estados Unidos ordena la repatriación de diplomáticos no esenciales de Haití. Canadá cierra temporalmente la embajada en ese país. La Comunidad del Caribe pide diálogo. También el secretario general de la OEA, Luis Almagro. La comunidad internacional tardó en reaccionar, pero las protestas violentas en Haití ya se hacen sentir más allá de las fronteras del país. Los manifestantes reclaman la dimisión del presidente Jovenel Moïse, que gobierna un país azotado por la crisis económica y la corrupción.
Haití encadena nueve días de protestas violentas que ya han dejado al menos nueve muertos en los enfrentamientos entre manifestantes y la policía, según informa la prensa local. Las protestas se iniciaron el 7 de febrero, coincidiendo con el segundo aniversario de la llegada a la Presidencia del país de Jovenel Moïse. Los manifestantes reclaman la dimisión de Moïse, que gobierna un país azotado por la crisis económica y la corrupción.
Las protestas han prácticamente paralizado Haití. Desde la semana pasada, en las calles de la capital, Port-au-prince, se suceden la quema de automóviles, los saqueos en comercios y violentos enfrentamientos entre manifestantes y policía, según reporta la prensa local. No obstante, en los primeros días del conflicto, apenas tuvo eco en la comunidad internacional, más enfocada en el posible desenlace de la crisis venezolana.
Aunque tarde, ahora esa protesta ya no puede ser ignorada y gana voz en la comunidad internacional. Esta semana Estados Unidos y Canadá emitieron sendas alertas de viaje a Haití “debido a los disturbios civiles en el país”. Además, EEUU ordenó la repatriación de diplomáticos no esenciales y sus familias. Canadá, por su parte, decidió cerrar temporalmente la embajada.
Hoy dialogué con el Canciller @BocchitEdmond sobre la situación de las recientes protestas violentas en #Haiti. Llamamos a todos los actores a participar activamente en el proceso de diálogo, respetar el proceso democrático y recurrir a formas pacíficas para resolver conflictos. pic.twitter.com/Z7EJzvj9Z7
— Luis Almagro (@Almagro_OEA2015) 14 février 2019
Este jueves Luis Almagro, secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), se reunió con el canciller de Haití, Bochhit Edmond, y apeló al diálogo. “Llamamos a todos los actores a participar activamente en el proceso de diálogo, respetar el proceso democrático y recurrir a formas pacíficas para resolver conflictos”, dijo Almagro en Twitter.
El mismo mensaje lanzaron desde el Core Group, integrado por el representante especial adjunto del secretario general de Naciones Unidas, los embajadores en Haití de Alemania, Brasil, Canadá, España, Estados Unidos, Francia y la Unión Europea y un representante especial de la OEA. Además, rechazaron los actos de violencia y lamentaron las muertes.
Este martes, el presidente de la Comunidad del Caribe (Caricom), emitió un comunicado en el que dice que la organización está “profundamente preocupada por las continuas protestas violentas en Haití, que han ocasionado la pérdida de vidas, propiedades y destrucción de infraestructura y gran angustia”. Pidió el fin de la violencia y llamó a los involucrados a “dialogar y respetar la Constitución, el Estado de derecho y los procesos democráticos para volver a la paz”.
El canciller chileno Roberto Ampuero también habló de Haití. Lo hizo en Twitter al mostrar su “profunda preocupación por lo que está sucediendo”. Dijo estar “en contacto permanente con otras cancillerías para monitorear la situación”.
¿Y Moïse?
El presidente de Haití se mantenía en silencio desde el sábado 9 de febrero, cuando apeló al diálogo en el país. Por eso el discurso que dio este jueves era muy esperado. De nuevo habló de diálogo. No debió convencer porque las protestas siguieron. Tampoco tranquilizó a EEUU. Según publica el diario haitiano Le nouvelliste, EEUU envió la alerta de viaje una hora después del mensaje de Moïse.
El discurso del presidente fue de siete minutos. Dice Le nouvelliste que sonó agresivo y que perdió la oportunidad de apaciguar las protestas. Tampoco anunció medidas concretas para hacer frente a la crisis económica del país. Esa tarea se la dejó al primer ministro Jean-Henry Céart. El presidente próximamente concretará medidas económicas para “aliviar a la población en esta coyuntura particular”, informó Moïse en Twitter.
Le Premier ministre @jeanhenryceant va annoncer dans les heures qui suivent les mesures économiques arrêtées pour soulager la population dans cette conjoncture particulière.
— Président Jovenel Moïse (@moisejovenel) 15 février 2019
Crisis económica y corrupción
La delicada situación económica en Haití se agravó en los últimos meses tras sufrir una fuerte depreciación del gourde, la moneda oficial, y una crisis de electricidad derivada de la escasez de gasolina, cuyo precio también subió en 2018. Además, el Gobierno no ha logrado aprobar aún los presupuestos para este año ante el rechazo de la Cámara de Diputados, lo que intensifica la parálisis económica del país.
Según informa France24, las protestas también buscan esclarecer una supuesta malversación de fondos de Petrocaribe, un acuerdo a través del cual Venezuela suministra petróleo en condiciones favorables a varios países caribeños. Una auditoría reveló irregularidades entre 2008 y 2016 en este programa que involucran a 15 exministros y funcionarios actuales, así como a una empresa que dirigía Moïse antes de presidir el país, publica este portal.
Las protestas empezaron en las calles de la capital, pero ya se han extendido por todo el país. Según informa France24, incluso un grupo de 78 presos pudo escapar de una cárcel gracias al asedio de unos manifestantes que atacaron el lugar. Las protestas están lejos de concluir.