Redacción (ALN).- Pese a que según las cifras probadas Venezuela tiene la sexta mayor reserva de gas natural en el mundo, en este país caribeño, azotado por una severa crisis que parece no tener fin, cada vez más las personas cocinan con leña o estufas eléctricas, debido a la caída de la producción y distribución del recurso.
El número de quienes usan gas directo incluso asusta si se compara con quienes usan el intermitente y pésimo servicio de gas por cilindros: apenas el 20 % del país, según explica el sociólogo Roberto Briceño.
«Hay una provisión del servicio de gas directo, pero las bombonas de gas llegan esporádicamente con precios diferentes y en divisas», manifestó Briceño en una entrevista con Fedecámaras Radio, que reprodujo el medio loca Banca y Negocios.
«Al mismo tiempo que se ajustan a los diferentes precios del mercado negro que son mucho más altos que los oficiales», agregó.
LEÑA PARA COCINAR
En este sentido, Briceñó lamentó que haya familias en Venezuela usando leña para cocinar, un fenómeno que, dijo, se aprecia con mayor fuerza en el interior del país.
«Podemos ver también a venezolanos que no tienen gran poder adquisitivo talando árboles para conseguir la leña para poder cocinar», remarcó.
SERVICIO A PIQUE
Pese a que solía ser un servicio regular, la producción y distribución de gas en Venezuela se ha visto afectada en los últimos años, cuando se elevó la tensión política en el país sudamericano.
El Gobierno del presidente socialista Nicolás Maduro suele achacar la caída de la insdustria petrolera venezolana a sabotajes -presuntamente coordinados por la oposición- y a las sanciones de Estados Unidos a la estatal PDVSA.
Pero la oposición rechaza estos señalamientos y acusa al Gobierno de Maduro, por su presunta gestión corrupta e ineficiente, como el verdadero responsable de la debacle de PDVSA.
Con información de Banca y Negocios.