Redacción (ALN).- Venezuela espera que una carga de 2,1 millones de barriles de condensado iraní comience a descargar en un puerto de PDVSA, una entrega que forma parte de un intercambio entre la nación de Medio Oriente y el país sudamericano.
PDVSA y la Compañía Nacional de Petróleo de Irán (NIOC) suscribieron un contrato de seis meses en su primera fase, para intercambiar condensado iraní por crudo pesado venezolano.
Según revela agencia Reuters, el primer cargamento zarpó de Venezuela en septiembre en el petrolero iraní Felicity. Luego, Irán suministró a PDVSA un primer cargamento de condensado en el petrolero Dino I, que zarpó de regreso la semana pasada con crudo venezolano.
El segundo cargamento de condensado iraní llegó a aguas venezolanas el lunes en el petrolero Dorena de bandera iraní.
Se espera que el condensado ayude a PDVSA a liberar crudos medianos y livianos para reanimar la refinación nacional, mientras reanuda la producción de crudo en muchos campos petroleros que habían sido cerrados debido a una aguda falta de material para diluir el petróleo extrapesado del país.