Redacción (ALN).- Con apenas 14 puntos de 100 posibles, Venezuela se ubica entre los cuatro países más corruptos del mundo, de acuerdo con un informe de Transparencia Internacional (TI), que alerta que casi el 90 % de las naciones del orbe no registra avances en la lucha contra este flagelo.
Venezuela, en particular, apenas es superada por Sudán del Sur), Somalia y Siria, los tres países más corruptos con 11, 13 y 13 puntos, respectivamente.
Sin embargo, cuando se habla de las Américas, Venezuela es de lejos el más corrupto, seguido de Nicaragua y Haití, calificados con 20 puntos cada uno.
Esta es la calificación más baja de Venezuela hasta la fecha, como consecuencia de haber acallado el régimen de Nicolás Maduro «el disenso entre sus rivales políticos, periodistas e incluso trabajadores sanitarios».
Canadá, por su parte, es la nación con menor percepción de corrupción en el continente, con 74 unidades. Uruguay (73), Chile (67) y Estados Unidos (67) completan este cuadro.
Dinamarca, Finlandia y Nueva Zelanda, los tres con 88 puntos sobre un máximo de 100, encabezan la clasificación mundial.
La pandemia como excusa para violar derechos
La ONG, que publica hoy el Índice de Percepción de la Corrupción (CPI) de 2021, alerta además de que si los gobiernos continúan utilizando la pandemia de covid-19 para erosionar los derechos humanos y la democracia, la corrupción podría empeorar a mayor velocidad.
«Muchos países han utilizado la pandemia como una excusa para cercenar libertades básicas y esquivar el sistema de pesos y contrapesos», denuncia el informe de la organización, con sede en Berlín.
TI otorga una puntuación a cada uno de los 180 países evaluados en función de su nivel de percepción de la corrupción. La media global se mantiene en 43 puntos por décimo año consecutivo, aunque dos tercios de los países no llegan a aprobar, con 27 que obtienen la puntuación más baja de su historia.
Preocupa el autoritarismo de El Salvador
En esta última década, 154 países han sufrido un deterioro en la percepción de la corrupción o no han avanzado sustancialmente. Preocupa especialmente la situación de algunas regiones como Centroamérica, donde crece el autoritarismo en países como Nicaragua o El Salvador.
Desde 2012, 23 países han decaído en el índice, entre ellos algunas economías avanzadas, como Australia (73), Canadá (74) y Estados Unidos (67), que, por primera vez, deja de estar entre los 25 países mejor calificados.
En cambio, 25 países han mejorado significativamente sus puntuaciones, entre ellos Estonia (74), Seychelles (70) o Armenia (49).
En 2021, entre las grandes potencias, además de Estados Unidos, que se mantiene con los mismos resultados del año pasado, China escala 3 puntos, con una puntuación de 45 frente a los 42 anteriores, mientras que Rusia cae de 30 a 29.
España cae
En este nuevo informe España baja un punto en la clasificación, de los 62 que obtuvo en el informe anterior, a los 61, y desciende desde el puesto 32 al 35, entre Lituania e Israel.
Este estancamiento general en la lucha contra la corrupción está relacionado, según la ONG, con los abusos a los derechos humanos y con el deterioro de la democracia en todo el mundo.
El informe destaca que los países que vulneran las libertades civiles obtienen de forma consistente puntuaciones más bajas en el índice.
Delia Ferreira Rubio, presidenta de Transparencia Internacional, afirma que el respeto de «los derechos humanos es más que algo deseable en la lucha contra la corrupción. Los modelos autoritarios destruyen los controles y contrapesos independientes y hacen que tomar acción contra la corrupción dependa de los caprichos de una élite».
Con información de Efe.