(EFE).- El presidente de Francia, Emmanuel Macron, tiene «la firme intención» de realizar su primer viaje oficial a América Latina en 2023 gracias a la sintonía con dirigentes de la región que llegaron hace poco al poder, el último de ellos el brasileño Lula da Silva, señalaron hoy fuentes diplomáticas francesas.
Desde que ascendiese al poder en 2017, Macron no ha realizado ningún viaje bilateral a América Latina y su única presencia en el continente fue en una cumbre del G20 en Buenos Aires en 2018.
Ahora, sin embargo, los nuevos gobiernos de «la izquierda democrática» de Gabriel Boric en Chile; Gustavo Petro en Colombia; y Lula da Silva en Brasil, que se unen al presidente argentino Alberto Fernández -en el poder desde 2019-, han propiciado una nueva dinámica de la parte francesa, indicaron las fuentes.
«El presidente (Macron) tiene la firme intención de visitar América Latina en 2023, pero no podemos precisar ni el lugar ni la fecha. Hay varias propuestas encima de la mesa», explicaron.
La cumbre en 2023 que anunció Petro para forjar una alianza para preservar la Amazonía y la toma de posesión de Lula da Silva el 1 de enero de 2023, vistas como dos fechas potenciales para el desplazamiento de Macron, no fueron confirmadas por las fuentes diplomáticas.
La renovada apuesta del presidente francés por la región tiene mucho que ver con la victoria del presidente del Partido de los Trabajadores, con el que espera trazar «una hoja de ruta conjunta» y avanzar en asuntos como la protección del medio ambiente, tema con el que Macron estaba enfrentado con Jair Bolsonaro.
«Brasil es un actor imprescindible en la región, la principal economía, con el que además tenemos 800 kilómetros de frontera a través de la Guyana francesa», expusieron las fuentes. La protección de la Amazonía y la lucha contra la deforestación figuran como dos ejes fundamentales.
No obstante, Francia esta vez no cuestionará la soberanía del mayor bosque tropical del mundo, con la idea de declararlo un bien público universal, pues ha entendido que es un asunto que hiere sensibilidades tanto en la derecha como en la izquierda de Brasil (un 70 % de la Amazonía está en territorio brasileño).
Principal motor económico del Mercosur, el gigante sudamericano tendrá una voz de peso en la futura relación del grupo con la UE, sobre la que pesa el acuerdo de asociación entre ambos bloques, que sigue sin ratificarse desde su firma en 2019.
Las fuentes diplomáticas explicaron que hay también muchas divergencias en el propio club sudamericano respecto a su relación con la UE, pues Argentina no está satisfecha y Uruguay explora un acuerdo con China.
«APERTURA EN VENEZUELA»
El gesto diplomático más reseñable de Macron hacia Latinoamérica durante sus más de cinco años de mandato ha sido la mesa de diálogo organizada en París el pasado 11 de noviembre entre oposición y régimen venezolano con la presencia de Fernández y Petro.
Las fuentes diplomáticas dijeron sentir una cierta «apertura» del régimen venezolano respecto a la salida de la crisis humanitaria e institucional que atraviesa el país ,y que ha desembocado en la diáspora de más de siete millones de venezolanos, dos ellos en la vecina Colombia.
Aunque esa negociación dependerá en gran medida del levantamiento de las sanciones petroleras de EEUU contra Venezuela, la reanudación de las conversaciones en México es «compleja», pero será «importante para estabilizar la región y favorecer un final democrático» de la crisis, señalan las fuentes.
Agregan que otro país de la región que preocupa a París, la Nicaragua de Daniel Ortega, «no teme para nada el aislamiento internacional contrariamente a Venezuela». De este modo, París asumió la imposibilidad de ver la luz al final del túnel a corto plazo, pues los opositores a Ortega están encarcelados o en el exilio.