Redacción (ALN).- Dimitri Hérard, jefe de la guardia presidencial de Haití e implicado en el asesinato del presidente Juvenal Moise, fue blanco de una investigación de Estados Unidos sobre un cargamento masivo de drogas en 2015, así como de tráfico de armas. Sin embargo, nunca fue acusado de un delito.
Según un exagente de la DEA, Hérard fue investigado por funcionarios estadounidenses durante años. «Hérard era una persona importante en el caso Manzanares», dijo a Univision Noticias el exagente Keith McNichols en una entrevista de dos horas.
El caso Manzanares
En abril de 2015, un barco que transportaba azúcar desde Colombia atracó en Haití. Cuando era descargado, un paquete de drogas se abrió en el muelle, y se descubrió un enorme cargamento de cocaína y heroína.
Los agentes antidrogas sospechaban que más de 700 kilos de cocaína y 300 kilos de heroína, por un valor de más de 100 millones de dólares, estaban ocultos bajo los sacos de azúcar. Pero la mayor parte de la droga no se encontró. Tras 28 días de registro del buque mercante Manzanares por parte de la DEA y los guardacostas estadounidenses, sólo se recuperó unos 107 kilos de cocaína y 13 kilos de heroína.
Luego se supo que parte de la droga había sido sustraída por vehículos con matrícula del Palacio Presidencial, supervisados por la policía local. Uno de los grandes sospechosos era Dimitri.
Hérard está ahora encarcelado en Haití, sospechoso de haber participado en el asesinato del presidente Jovenel Moïse, cuando un grupo de exmilitares colombianos irrumpió en la residencia presidencial el 7 de julio, encontrando misteriosamente poca o ninguna resistencia por parte de la seguridad de Hérard y del palacio.
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