Redacción (ALN).- La repentina muerte del Papa Francisco inunda de dudas el futuro del Vaticano. Deberán ser los cardenales los que elijan al nuevo Sumo Pontífice tras reunirse en el Cónclave. Aun así, hay quienes prefieren ser más escépticos y observar qué dicen las profecías tras la muerte de Jorge Mario Bergoglio. La más difundida en estos instantes es la de Baba Vanga.
En una de sus múltiples profecías aseguraba que tras la muerte del Papa, se produciría un cambio muy significativo en la estructura religiosa del mundo, lo que conllevaría el fin de una era. Muchos creyentes han vinculado este vaticinio con la muerte de Francisco I, pero en ningún momento se menciona ningún rasgo o característica que invite a pensar en el pontífice argentino.
Del mismo modo, Baba Vanga señaló que esta muerte se produciría mientras la humanidad estaría envuelta en una crisis global, provocada por desastres naturales, el cambio climático y una situación desesperante de hambruna en África. También destaca que los humanos tendríamos contacto con extraterrestres y que se producirían avances médicos y tecnológicos muy importantes.
Las profecías de Nostradamus
Más allá fue, incluso, Nostradamus en sus escritos. Éste vaticinó que el sucesor del Papa Francisco podría ser el último de todos los tiempos. De la misma forma, esta fue su apreciación sobre el mismo: “No será el romano pontífice elegido, ni cerca ni lejos se le prestará atención. Un joven de piel oscura con la ayuda del gran rey entregará la bolsa a otro de color rojo”.
Esta teoría ha provocado que muchos vean como el gran favorito a ser el nuevo Sumo Pontífice al cardenal Robert Sarah. Guineano, de 79 años, y prefecto emérito de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos. En las redes sociales ya se han difundido innumerables teorías sobre la identidad del sustituto.
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