(EFE).- La central termoeléctrica Antonio Guiteras, la mayor de Cuba, dejó de funcionar de forma abrupta este martes tras recibir el impacto de un rayo, informó el periódico oficial Granma.
La descarga golpeó directamente al equipo de protección contra este tipo de fenómenos, según la publicación; pero la fuerza fue de tal magnitud que destruyó el pararrayos de la línea de salida de la central.
Hasta el momento se desconoce el balance de daños en la planta eléctrica y el alcance de las afectaciones que pueda provocar el parón en el suministro eléctrico.
Esta misma central ya ha presentado problemas en lo que va del año. A mediados de marzo quedó fuera de servicio debido a la avería en una caldera. Esto sucedió una semana después de un parón planificado para darle mantenimiento.
Semanas más tarde, el 16 de abril, la Antonio Guiteras presentó otra falla “imprevista” y no volvió a estar operativa hasta cinco días después.
Durante esos días, en la provincia occidental de Matanzas -así como regiones colindantes- se programaron apagones de tres horas; durante varias jornadas seguidas.
El pasado lunes, el presidente Miguel Díaz-Canel reconoció una situación “tensa” en el sistema eléctrico nacional; por las averías en ocho unidades generadoras desde la semana pasada.
En los últimos días Cuba ha vivido una serie de cortes en el suministro de electricidad de varias horas consecutivas en regiones de las provincias de Granma (oriente) y Matanzas. En La Habana; las afectaciones han sido más esporádicas.
Situación del Sistema Electroenergético Nacional (SEN)
El pasado viernes, la estatal Unión Eléctrica Cuba (UNE) informó que la situación del Sistema Electroenergético Nacional (SEN) era «compleja» e hizo un llamamiento a las zonas afectadas, sobre todo el oriente y el centro, a hacer un uso racionado de la energía.
La UNE ha notificado más de 300 afectaciones -por averías o tareas de mantenimiento- en gran parte de las 13 centrales termoeléctricas del país (8 terrestres y 5 flotantes) en los últimos 11 meses.
Cuba depende en gran medida del petróleo extranjero para producir energía (las termoeléctricas generan dos tercios de la electricidad) y su principal proveedor; Venezuela, ha disminuido notablemente sus envíos.
Además, el grueso de sus plantas ya ha cumplido su ciclo de vida y necesita una renovación para seguir satisfaciendo la demanda.
La isla aspira a reducir la dependencia hacia el exterior y cuenta con un plan; para que en 2030 el 37 % de su mix energético (algo más de 3.500 megavatios) provenga de fuentes renovables.
El Gobierno insular trabaja a marchas forzadas para poner a punto el sistema de cara al verano, la estación del año en la que más se utiliza la electricidad por los aires acondicionados.
Los apagones fueron una de las razones económicas, junto con la escasez y la fuerte inflación, detrás de las protestas antigubernamentales del julio pasado.