Daniel Gómez (ALN).- José Joaquín Said Saiff, propietario de importantes centros comerciales en Chile y Perú, controla un 39,1% de la filial chilena de BBVA. A él se le atribuyen las negociaciones para que Francisco González venda el porcentaje restante. El negocio de BBVA en el país va viento en popa con incrementos por encima del 75%, pero su importancia en las cuentas globales es mínima si se compara con México y España. Sería, por tanto, una buena oportunidad para conseguir ingresos en el corto plazo.
BBVA podría desprenderse de su filial en Chile. The Bank of Nova Scotia, del grupo canadiense Scotiabank, ha mostrado interés en adquirir el 100% del capital social de la entidad. Lo hace justo en el momento que mejor va el negocio para el banco que preside Francisco González. Atendiendo a los estados financieros de la primera mitad de 2017, BBVA Chile creció por encima del 75% y se situó como el tercer mercado de América Latina.
Pese al buen comportamiento, su aportación en los resultados globales es mínima. Ganó 96 millones de euros (114 millones de dólares) de enero a junio de 2017, una cifra que poco tiene que ver con los principales negocios de BBVA. Bancomer, filial en México y joya de la corona del grupo, cerró el semestre con un beneficio atribuido de 1.080 millones de euros (1.282 millones de dólares). En España, las ganancias fueron de 670 millones de euros (796 millones de dólares); en Turquía, de 374 millones de euros (444 millones de dólares); y en Estados Unidos, de 297 millones de euros (353 millones).
Sin embargo, el resultado de BBVA Chile está en la línea con los negocios del grupo en Suramérica. Solo le supera Argentina, con un resultado atribuido de 106 millones de euros (126 millones de dólares). Mientras que las filiales de Colombia y Perú están por debajo con cifras un poco por encima de los 80 millones de euros (95 millones de dólares).
Si Scotiabank materializa la compra de BBVA Chile, ganaría unos 100 millones de euros
En un hecho relevante remitido este jueves a la Comisión Nacional de Mercados de Valores (CNMV) de España, BBVA precisó que el interés de Scotiabank “no es vinculante”. Asimismo, confirmó que “Scotiabank ha solicitado revisar documentación e información no pública de BBVA Chile y entrevistarse con los gestores de esta entidad para poder analizar la operación, lo que ha sido autorizado por los responsables de BBVA Chile, tras la firma de un acuerdo de confidencialidad”.
En ese mismo comunicado, BBVA apunta que todo surge de informaciones presentadas por la prensa chilena. La Tercera, uno de los diarios de referencia, apunta a la familia Said como una de las responsables de la posible operación. El 68,1% de la filial chilena pertenece a BBVA, mientras que el resto forma parte del Grupo Said, presidido por José Joaquín Said Saffie.
Said Saffie, con nacionalidad chilena pero nacido en Perú, desarrolló gran parte de su fortuna con los centros comerciales. Dirige Parque Arauco, una inmobiliaria especializada en la explotación de grandes almacenes. Cuatro de los más importantes están ubicados en la capital chilena. A través de esta empresa, Said también controla Megaplaza, la cadena de los Wiese, una familia de importantes multimillonarios peruanos con presencia en Lima, Chimbote y Chincha (Perú).
Joaquín Said Saffie estaría jugando un rol relevante en la negociación, según la prensa chilena. Al parecer, tiene carta blanca para buscar socios y posibles fusiones. Y es que el objetivo del empresario es consolidar lo que sería el primer grupo financiero del país.
BBVA, con 19 años en Chile, es el séptimo banco del mercado chileno. Nunca ha encontrado apoyos para ganar músculo más allá del capital español. De ahí que la familia Said contratara los servicios de Bank of America Merrill Lynch para analizar opciones, según informa La Tercera.
Cinco bancos tras el negocio de BBVA Chile
Este mismo diario asegura que en la pelea por BBVA Chile hay hasta cinco implicados. Las entidades chilenas de Security, Banco de Inversión (BICE), el Banco de Crédito e Inversiones (BCI) y el recién fusionado Itaú-CorpBanca; así como el reconocido por el grupo español, Scotiabank.
El banco canadiense tiene una cuota de mercado del 6,3% en Chile. Es un actor conocido tanto en América Latina como en el Caribe. La presencia más importante la tienen en México, Perú y Colombia. También tiene intereses en Venezuela, pero como otras tantas empresas, han situado sus resultados en un lugar irrelevante de las cuentas por la reconocida hiperinflación y el complejo esquema cambiario.
Por tanto, México, Perú y Colombia son los responsables de tres cuartas partes del beneficio auditado en 2016 en Latinoamérica y el Caribe, que sumó 1.079 millones de euros (1.281 millones de dólares). En el mismo ejercicio, la filial chilena The Bank of Nova Scotia contribuyó a las cuentas de Scotiabank con 94 millones de euros (112 millones de dólares). Un resultado que aumentaría unos 100 millones de euros (118 millones de dólares) en el medio plazo si se materializa la compra de la filial de BBVA. La resolución de las negociaciones se conocerá en unos 45 días, según la prensa chilena.