Daniel Gómez (ALN).- Es el gran reto del presidente y fundador de la firma colombiana, Yonatan Burszty: “Hay dificultades, es cierto, pero tenemos que estar presentes en e-commerce. Para eso nos concentramos en aquellos núcleos donde la población latinoamericana domina el smartphone y tiene acceso a la tarjeta de crédito. En Colombia, por ejemplo, la plataforma online de Totto es un éxito», asegura en una entrevista para el diario ALnavío.
La moda es una industria casi inexistente en Latinoamérica. Pero eso no fue un problema para Yonatan Burszty, presidente del grupo textil Totto. ¿Cómo lo logró? Dice al diario ALnavío que “siempre hay oportunidades”. En este caso, “la oportunidad era llenar los huecos que dejan las grandes compañías textiles, que no son las mejores ofreciendo servicios al consumidor”. Desde la base, priorizando el trato al cliente, consolidó una marca global en Colombia.
En 1987, Burszty, que por entonces tenía 28 años, compró una fábrica de manufacturas de cuero en bancarrota. La llamó Nalsani, que es la sociedad matriz de Totto. Despuntó con la venta de mochilas para niños. Luego amplió el catálogo y empezó a ofrecer prendas de toda clase para todo tipo de públicos. La firma era un éxito y por eso se lanzaron fuera de las fronteras de Colombia en 1992. Ese año abrieron en Costa Rica la primera franquicia internacional.
Tres décadas después de fundar Totto, Burszty gestiona una firma con presencia en más de 50 países. “Ese siempre fue el objetivo, ser una marca de carácter global y que demuestre que la moda en Colombia y en América Latina no tiene nada que envidiar a la de Italia, Francia y España”, apunta.
Totto es una empresa rentable. Genera ganancias por encima de los siete millones de euros (8,2 millones de dólares) y registró unos ingresos de 128 millones de euros (150 millones de dólares), según los estados financieros de Nalsani en 2016.
Para el corto plazo, el objetivo que se fija Burszty es el de afianzar Totto en Europa: “De momento tenemos una presencia importante en España y Grecia, pero todavía podemos ganar peso en este mercado tan grande”.
El reto del comercio online
El otro reto de Burszty tiene que ver con las ventas por internet. Y eso es mucho decir cuando la empresa se asienta en América Latina, región donde el e-commerce es, en boca de gigantes de la logística como eBay y DHL, “un desastre”. Pese a ello, el empresario no tiene miedo.
Cuenta con una estrategia que usa con Totto y con la que ha logrado triunfar. “Hay dificultades, es cierto, pero tenemos que estar presentes en este mercado. Para eso nos concentramos en aquellos núcleos donde la población latinoamericana domina el smartphone y tiene acceso a la tarjeta de crédito. En Colombia, por ejemplo, la plataforma online de Totto es un éxito. Y lo es porque nos concentramos en las características que acabo de citar”, detalla.
“De momento tenemos una presencia importante en España y Grecia, pero todavía podemos ganar peso en este mercado tan grande”
Burszty fue protagonista en el Congreso Iberoamericano para Presidentes de Compañías y Familias Empresarias que organizó el Consejo Empresarial Alianza por Iberoamérica (Ceapi) la semana pasada en Madrid. Este empresario fue una de las figuras que acudieron desde Colombia. Junto a él, otros grandes nombres como Alejandro Santo Domingo y Adriana Sarmiento.
Burszty, de ascendencia polaca, ha vivido siempre en Colombia. Y como colombiano, ha seguido muy de cerca el proceso de paz con el que se pone fin a los 50 años de guerrilla que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) han protagonizado en el país. “Con el tiempo valoraremos y agradeceremos lo que está haciendo este gobierno. En los libros de historia cinco años se resumen en dos páginas. Dejemos ese tiempo y juzguemos. Este proceso hará historia en Colombia y en el mundo”, concluye.