Daniel Gómez (ALN).- Telefónica Hispanoamérica se escinde en Sur y Norte. La nueva estructura va más allá de lo geográfico. El horizonte en los países del Sur, como Argentina, Chile, Perú y Uruguay, es prometedor. En el Norte no. De hecho, es en Colombia, Venezuela y México donde la empresa española ha lidiado con más problemas en los últimos años.
Telefónica se renueva, y lo hace apostando “por la simplificación, por una estructura que se adapte al nuevo entorno digital”, según dijo en un comunicado publicado este martes. Hay cambios en áreas de gobierno y también en la forma de abordar el mercado latinoamericano.
En este sentido apuntó: “Telefónica Hispanoamérica se escinde en dos unidades para atender de forma más efectiva las diferentes situaciones del mercado”. Estas son Hispam Sur e Hispam Norte. Y es que, aunque parezca un corte geográfico, la nueva división tiene otras implicaciones.
Bernardo Quinn, ingeniero industrial por el Instituto Tecnológico de Buenos Aires, con un máster en dirección de empresas por Harvard Business School, y con dos décadas de experiencia en Telefónica, dirigirá la unidad Sur, que es, sin duda, la parte más dulce de la tarta.
Hispam Sur está compuesto por Argentina, Chile y Perú, que, en este orden, son los tres principales mercados de Telefónica en la parte hispana de Latinoamérica. A este mercado se suman las operaciones en Uruguay, uno de los países más prósperos de la región que, aunque no tenga un peso destacado en las cuentas, da un rendimiento de doble dígito.
“Telefónica Hispanoamérica se escinde en dos unidades para atender de forma más efectiva las diferentes situaciones del mercado”
La geografía en este caso es caprichosa. Y si en el Sur el pastel sabe dulce (en el Sur también está Brasil, el primer mercado internacional de Telefónica), en el Norte, es decir, Colombia, México, Centroamérica, Ecuador y Venezuela, se saborea amargo.
Alfonso Gómez Palacio será el director de Hispam Norte en 2018. Gómez Palacio, colombiano, es abogado por la Pontificia Universidad Javeriana de Cali, tiene estudios en Ciencias Políticas en el Loras College de Estados Unidos y en gestión tributaria en la Universidad de Rosario. Lleva en el grupo más de 10 años. Entre 2007 y 2016 ocupó el cargo de presidente ejecutivo en la filial colombiana y en 2017 también el de consejero delegado de Telefónica Colombia.
Problemas en Colombia, Venezuela y México
Por raíces y sobre todo por experiencia, el nuevo director de Hispam Norte conoce al dedillo la situación colombiana. Seguro que está al tanto de la multa de 452 millones de dólares que el gobierno de Juan Manuel Santos impuso a la teleco española en julio de 2017. Una sanción que desde la empresa tildaron de “desorbitada”, y que aún andan recurriendo ante la justicia local.
Pero no es sólo Colombia. También es Venezuela. El historial de conflictos es largo y la situación por la que atraviesa el país, conocida por todos. De momento aguantan, pero si la hiperinflación se prolonga en el tiempo, el deterioro de los equipos de la filial podría reportar un buen número de pérdidas.
Luego está México, un prometedor mercado en el que Telefónica no termina de despegar. Ocurre que allí la regulación todavía es muy favorable para América Móvil, la compañía de telecomunicaciones número uno del país, propiedad del magnate Carlos Slim, que ostenta el 60% de la cuota de mercado.
Tampoco hay que olvidar la incertidumbre, sobre todo la causada por las elecciones presidenciales del próximo 1 de julio. De momento las perspectivas son buenas. La promesa del Gobierno es liberar las telecomunicaciones. Pero una Administración nueva podría dar marcha atrás a los planes de apertura.
Por último, están Ecuador y Centroamérica. Dos mercados que casi no tienen peso en las cuentas del grupo y de los que Telefónica apenas suministra información.
Hay que recordar que estos cambios aún no son definitivos. El Consejo de Administración los debe ratificar en la reunión que mantendrá mañana miércoles.