(EFE).- El ministro de Exteriores de Surinam, Albert Ramdin, anunció este viernes que volverá a exigir visados de entrada para ciudadanos de 21 países a partir del 1 de mayo, menos de un año después de que anulara este requisito para promover el turismo.
«La exención de visado no se está utilizando para los fines previstos», declaró Ramdin, explicando que la obligación de visado se aplicará a los países cuyos ciudadanos han sido descubiertos abusando de éste al entrar a Surinam.
En este sentido, señaló que esta medida se implantará para los ciudadanos de República Dominicana, Cuba, Venezuela, India, Nepal, Pakistán, Bangladesh, Kenia, Ghana, Somalia, Camerún, Etiopía y Siria, entre otros.
Asimismo, el ministro indicó que aunque también ha aumentado el número de llegadas procedentes de China, Marruecos, Rumanía y Colombia, no se establecerá la obligación de visado para los ciudadanos de estos países.
Gobierno de Surinam no quiere problemas con otros países
Ramdin explicó que, cuando el Gobierno introdujo la exención de visado el 1 de mayo del año pasado, el objetivo era conseguir el mayor número posible de turistas para Surinam y hacer el país más accesible a los inversores extranjeros.
Sin embargo, dijo, se hizo una evaluación y se descubrió, entre otras cosas, que los viajeros utilizaban Surinam como escala.
«Un pequeño grupo abusa de esto y es algo que no podemos permitir», enfatizó el titular de Exteriores.
«No queremos problemas con otros países porque nos hemos convertido en un conducto. No queremos ser vistos como un país que facilita el contrabando de personas y el movimiento ilegal de personas», agregó.
Ramdin indicó además, que los orientales estaban tomando ventaja tras la decisión local que permite a extranjeros visitar el país suramericano sin visado, aunque posean un pasaporte válido.
Según el ministro, más de 2.500 ciudadanos de Asia del Este han llegado legalmente a Surinam en los pasados meses, aunque no especificó el número exacto.
Un grupo de 150 extranjeros, entre ellos paquistaníes y africanos, fue detenido en el aeropuerto internacional de Zanderij en Paramaribo la semana pasada tras impedir su entrada en el país.
Ramdin explicó que algunos de ellos ya fueron devueltos a su país y que todos serían repatriados.