Redacción (ALN).- “Las fuerzas que lo apoyaban, en la sociedad civil, en los grupos empresariales, han desertado”, señala el escritor y exvicepresidente de Nicaragua, Sergio Ramírez.
La violencia, los muertos, los secuestros… Todo esto es producto de la soledad de Daniel Ortega, presidente de Nicaragua. Así lo piensa el escritor Sergio Ramírez. “Ortega y su esposa [la vicepresidenta, Rosario Murillo] han quedados solos, rodeados por un reducto, mientras el resto de las fuerzas que lo apoyaban, en la sociedad civil, en los grupos empresariales, han desertado. La correlación de fuerzas ha cambiado totalmente, y ahora está en su contra”, comentó el Premio Cervantes de 2017 y exvicepresidente del país entre 1984 y 1990, en el programa de televisión Esta Semana, que se transmite por Canal 12 de Nicaragua. Según Ramírez, el aislamiento de la pareja presidencial explica su agresiva actitud. “Por eso decía que están a la defensiva. Estas Hilux en las calles que la gente llama ‘carretas nahuas’ cargadas de paramilitares revueltos con policías que agreden con tanta violencia, son defensivas. Nadie que tiene la iniciativa hace eso”. En la entrevista, el escritor afirmó que la protesta es “cívica” y “desarmada”, lo cual es único en Nicaragua, donde todos los regímenes dejaron el poder tras un conflicto armado. “Ahora estamos frente a una revolución desarmada, una revolución cívica que ojalá se mantenga así hasta el final, porque lo que menos debemos desear aquí es una guerra civil, y otra vez, Estados Unidos está de por medio”, añadió. Sobre esta última alusión ahondó Ramírez, achacando a Ortega que no negoció la salida del poder con el pueblo, sino con EEUU. “Es con Estados Unidos con quien el presidente Ortega negoció su salida”, agregó.