Redacción (ALN).- Como cada vez que hay elecciones presidenciales en el horizonte de Venezuela, el empresario Lorenzo Mendoza vuelve a ser tendencia en el país caribeño.
Y como cada vez que el nombre del exitoso empresario se repite en las redes, Lorenzo Mendoza guarda un silencio que ya dejó de ser anecdótico para transformarse en una declaración de intenciones: No está interesado en meterse en la arena política.
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Sin embargo, esto no es suficiente para que miles de simpatizantes de la oposición pidan que sea este gerente, líder del Grupo Polar, quien sea el candidato del antichavismo a la Presidencia en 2024.
Es precisamente esta posibilidad la que lleva al chavismo, por otro lado, a usar las mismas redes para exponer sus críticas al empresario.
Así, le acusan de la subida de los precios de los productos básicos, de despedir empleados, de pagar bajos salarios y hasta de no sentirse venezolano.
Las críticas incluso han llegado desde lo más alto del chavismo. A inicios de mayo pasado, Lorenzo Mendoza también fue tendencia en las redes después de que el dirigente Diosdado Cabello lo calificara como «parásito» y «chupa dólares».
Mientras que en enero pasado, Mendoza fue tendencia cuando la encuestadora Hinterlaces afirmó que es un personaje «impopular» en el país.
El trabajo de la encuestora afirma que Mendoza es rechazado por el 35 % de los venezolanos; mientras que el 50 % le apoya y un 15 % prefirió no responder.
Esos datos le sitúan como el séptimo «dirigente opositor» más rechazado del país, pese a que no es político.