Juan Carlos Zapata (ALN).- A Rusia le interesa la negociación. A Rusia le interesa que continúe, y sin perturbaciones. El vicecanciller ruso de visita en Caracas, Serguéi Ryabkov, es de los que piensan que nadie debe perturbar el rumbo de la negociación.
Rusia quiere que se le vea como un factor de peso en la solución de la crisis venezolana. Rusia ha mantenido el discurso contra la injerencia extranjera, contra la intervención militar, contra la imposición desde afuera de presidentes, en referencia a Juan Guaidó. Rusia ahora también apoya la negociación. Rusia apoya la mediación que lleva a cabo el gobierno de Noruega.
De modo que Rusia, que quiere que se le vea como un factor de peso en el caso Venezuela, ahora insta “a los actores externos a que se abstengan de los intentos de influir de manera negativa sobre el mismo o hacerlo fracasar”.
Esta mediación comienza hoy en Barbados una nueva ronda. Y ya serán tres, más dos que se realizaron en Oslo. Es una negociación en la que ha habido avances. Tanto que el propio gobierno de Noruega ya habla de abrigar esperanzas de que se arribe a un arreglo.
Fuentes informan que esta tercera ronda de Barbados es importante. Es un paso importante para el anuncio de algunos avances. De hecho, Nicolás Maduro ha instado a la militancia y dirigencia del partido de gobierno, PSUV, a prepararse para unas próximas elecciones para derrotar a las fuerzas de Juan Guaidó, aunque Maduro no aclara si se trata de elecciones presidenciales. Pero es Diosdado Cabello, número 2 del régimen, el que señala que son elecciones parlamentarias, negando cualquier posibilidad de que sean las presidenciales.
Pero esto es un decir. Porque lo que está sobre la mesa de la negociación son las elecciones presidenciales. Y lo saben los rusos. Lo sabe el vicecanciller ruso que le declaró al diario Sputnik que “lo más importante ahora es permitir que este proceso [de diálogo] avance”. Como se ve, los rusos se involucran en la negociación. Sobre el tema hablaron el presidente de Rusia, Vladímir Putin, y el Papa Francisco. Sobre el tema, hablaron Putin y Mike Pompeo, secretario de Estado de los Estados Unidos. Sobre el tema Venezuela hablaron Putin y Donald Trump en la reciente Cumbre del G-20 celebrada en Japón.
De modo que Rusia, que quiere que se le vea como un factor de peso en el caso Venezuela, ahora insta “a los actores externos a que se abstengan de los intentos de influir de manera negativa sobre el mismo o hacerlo fracasar”. Seguro que esta es una respuesta de Rusia a las decisiones de la semana pasada de la Eurocámara y de la Unión Europea en el sentido de que se aplicarán más sanciones, que habrá más sanciones, si en la negociación no hay resultados. O las nuevas sanciones impuestas por los Estados Unidos a funcionarios de la contrainteligencia de Maduro.
Por primera vez el gobierno de Noruega habla de “esperanza” en la negociación de Maduro y Guaidó
Serguéi Ryabkov deja ver que esa negociación hay que cuidarla. Porque, dijo, se trata “de la única plataforma donde el Gobierno y la oposición tienen de momento la posibilidad de trabajar sobre una agenda sustancial”. Palabras claras del funcionario ruso.
Rusia también entiende que la solución a la crisis pasa por la celebración de elecciones. Lo ha dicho Putin y lo han dicho otros funcionarios rusos. Está por verse cuándo y cómo, en qué condiciones. Es que a Rusia le importa ser reconocida como un factor que hizo posible estas elecciones. ¿Cuánto le dijo Ryabkov a Maduro en la reunión que sostuvieron este fin de semana? De Barbados saldrán señales.