(EFE).- Las tropas rusas se han hecho con el control de la ciudad de Jersón, en el sur de Ucrania, según un comunicado del Ministerio de Defensa de Rusia.
Según los militares rusos, en la ciudad, con cerca de 300.000 habitantes y situada en el río Dniéper y a orillas del mar Negro, «la infraestructura civil y el transporte público funcionan con normalidad».
Kiev informó en la madrugada del martes sobre el inicio del asalto ruso a Jersón, próxima a la península de Crimea, que Moscú se anexionó en 2014.
Según el último parte de los militares rusos, desde el inicio de la operación militar en Ucrania, el pasado 24 de febrero, fueron destruidos 1.502 objetivos de infraestructura militar de Ucrania.
«47 aviones fueron aniquilados en tierra y 11 en aire», agrega la nota castrense.
Las fuerzas rusas también destruyeron 472 tanques y otros blindados ucranianos, así como 62 lanzaderas de misiles múltiples y 206 piezas de artillería y morteros.
Sin escasez de alimentos
Rusia aseguró que en Jersón no hay escasez de alimentos y artículos de primera necesidad.
«Continúan las negociaciones con el mando ruso y la administración local para solucionar asuntos relacionados con el funcionamiento de las instalaciones de infraestructura social, así como garantizar el orden y la seguridad de la población», dijo el portavoz de Defensa, Ígor Konashenkov.
Según el militar, las tropas rusas cerraron el acceso de las Fuerzas Armadas de Ucrania al mar de Azov.
Saqueo de tiendas
«Por la noche vi desde mi ventana cómo los soldados rusos saqueaban las tiendas y se llevaban la comida. ¡Ladrones!», comentó a Efe por teléfono una residente de Jersón de 68 años que prefirió guardar el anonimato.
Según la testigo, música de profesión, su barrio «está totalmente ocupado por militares rusos y blindados pesados».
«Los militares rusos quitaron las banderas ucranianas de los edificios gubernamentales en la Plaza de la Libertad, pero los habitantes de la ciudad las levantaron, no se asustaron y comenzaron a ondearlas frente a ellos», afirmó.
La testigo, que vive en las cercanías de la plaza, afirma que «hay transportes blindados rusos en todas las esquinas, de dos en dos».