Redacción (ALN).- El joven Anther Herrera, de 29 años, podría considerarse muy afortunado de estar vivo. Y es que hace algunos años atrás estaba inmerso en el mundo de la violencia en su natal El Consejo, en el céntrico estado venezolano de Aragua, donde robaba, secuestraba y mataba.
«Era un adolescente inmaduro. Quería vestirme bien, tener dinero y una moto, aparentar y llamar la atención», dice ahora Herrera, durante una entrevista con BBC Mundo, con marcado arrepentimiento.
LEA TAMBIÉN
Nancy Duarte se convierte en la primera maestra ronera de Santa Teresa
«Debo reconocer que maté (…), lo reconozco y me arrepiento. Hoy lucho por un futuro mejor y para que otros adolescentes o jóvenes no caigan en el camino en el que yo caí», agrega.
Anther es uno de los cientos de jóvenes que han abandonado la violencia tras ingresar al Proyecto Alcatraz, que lanzó en 2003 el fabricante de ron venezolano Santa Teresa para atajar la violencia en la región.
El programa, que sigue en marcha y enseña los valores del rugby para alejar de la violencia a los jóvenes, nació luego de que una banda ingresara a las instalaciones de la ronera para robar el armamento de los guardias de seguridad con el fin de enfrentarse a una pandilla rival.
«Engañaron a un agente, lo golpearon y le quitaron el armamento», dijo a BBC Mundo el gerente del proyecto Alcatraz, Gabriel Álvarez.
Redención o cárcel
Entonces, el presidente de la empresa, Alberto Vollmer, fue informado de la situación, que decidió encarar con valentía: buscó a los delincuentes y les ofreció las opciones de redimir su delito con cárcel o trabajar durante dos meses sin paga en la Hacienda Santa Teresa.
LEA TAMBIÉN
Santa Teresa 1796 es galardonado como el ron Venezolano del Año en Berlín
El pandillero, que era conocido como «Cara de León», escogió la segunda opción. Y luego se sumaron otros dos cómplices.
«La mañana de un lunes vamos a la entrada de la hacienda y están los 22 miembros de la banda esperando en la puerta y pidiendo formar parte de un proyecto que en aquel momento no existía, pero que creamos después», recuerda Álvarez.
LEA TAMBIÉN
Autorizan a Ron Santa Teresa a emitir papeles por 300.000 dólares
Pero aunque los miembros de la pandilla querían rehabilitarse, temían que la banda rival los asesinara fácilmente en las calles, por cuanto no querían abandonar la hacienda.
Así que decidieron reclutar a los delincuentes rivales y, más tarde, incluso las bandas pequeñas se unieron al programa.
Con información de BBC Mundo.