Daniel Gómez (ALN).- Todas las unidades de la multinacional evolucionan de forma positiva y alcanzan los 576 millones de euros de beneficio en el tercer trimestre de 2017, 10% más que en el mismo periodo de 2016. Crece la producción, como también crece la facturación en los negocios de exploración, transporte, comercialización y refino.
El beneficio neto ajustado de Repsol alcanza los 576 millones de euros en el tercer trimestre de 2017, un incremento de 10% con respecto al mismo periodo de 2016, dice el informe remitido este viernes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores. Los resultados se producen en un ambiente propicio para la compañía, inmersa en un plan de eficiencia con el que prevé ahorrar hasta 2.100 millones de euros cuando termine el año.
Así, todas las líneas de negocio de Repsol evolucionan de forma positiva. Por un lado, el área de exploración y producción (upstream) significó 148 millones de euros, un impulso de 176 millones de euros en comparación con el mismo trimestre de 2016.
Explican este progreso los mayores precios de realización de crudo y gas, la reanudación de la producción en Libia y los menores gastos de exploración. “Estos efectos fueron parcialmente compensados por una mayor amortización técnica. Unas menores tasas impositivas efectivas, como resultado del mix de resultados y la evolución de las tasas de cambio de las monedas locales, impactaron positivamente el resultado ajustado”, destaca el informe.
Por su parte, la producción fue 3% superior en el tercer trimestre comparado con el mismo periodo del año anterior. Se alcanzaron los 693.000 barriles de media al día debido a la reanudación del negocio en Libia, al inicio de la producción de Juniper en Trinidad y Tobago, de Lapa en Brasil, de Flyndre, Shaw y Cayley en Reino Unido y a la conexión de pozos en Sapinhoa Norte, Brasil.
Matiza Repsol que “todo ello está compensado por la venta de TSP en Trinidad y Tobago, Tangguh y Ogan Komering en Indonesia, al declino natural de los campos y al impacto de la fluctuación en la demanda de gas en Perú y Bolivia”.
Mejora la producción de Latinoamérica y el Caribe
Salvo en Norteamérica, el grupo que preside Antonio Brufau mejora la producción en todos los mercados en el periodo de julio a septiembre. Sobre todo destaca el desempeño de América Latina y el Caribe, que sigue a la cabeza al superar la línea de los 300.000 barriles al día (302.000 barriles, según los datos provisionales), un aumento de 4,7% con respecto al segundo trimestre.
Mejoraron los márgenes y los volúmenes de destilación en refino en España y Perú
Por otro lado, el negocio de downstream tuvo un resultado neto ajustado de 502 millones de euros, 27% superior. En el periodo mejoraron los márgenes y los volúmenes de destilación en refino en España y Perú. También destacan unas mayores ventas en petroquímica, mejores resultados en el negocio de trading (compraventa de instrumentos petroleros), una mayor contribución del segmento de marketing, así como un mejor comportamiento del negocio del gas natural licuado.
Otros puntos reseñables del trimestre son el resultado bruto de explotación (Ebitda), que alcanzó 1.587 millones de euros, 38% superior al mismo periodo de 2016, y la deuda neta de Repsol, que se situó en 6.972 millones de euros al final de septiembre. Esto supone un pasivo de 505 millones de euros inferior respecto al cierre del segundo trimestre de 2017.
Sobre la deuda, Repsol añade que la fuerte generación de caja operativa, que supera con creces las inversiones netas, los intereses financieros y el pago de dividendos, fue clave para conseguir este descenso.