Redacción (ALN).- Medir el progreso, aprender de los mejores e involucrarse en el cambio climático. Estos son, en líneas generales, los tres consejos del Foro Económico Mundial para convertirse en un buen inversor. ¿Pero como ejecutarlos?
El Foro Económico Mundial, junto con el grupo de gestión de activos Mercer, hizo una encuesta a 110 grandes inversores. A estos profesionales de los negocios les preguntaron qué tienen que hacer para tener éxito. Las respuestas recolectadas se pueden resumir en estas tres:
Medir el progreso
¿Estamos en modo de desarrollo para abordar estas tendencias sistémicas? ¿Qué podemos hacer para parecernos más a los inversores que están liderando el camino? La respuesta a esta pregunta podría darse si los inversores deciden medir el progreso.
Para ello, el Foro Económico Mundial y Mercer han desarrollado un marco que permite a los inversores medir su progreso en las tendencias temáticas clave.
“La autoevaluación permitirá a los inversores ser más proactivos al abordar estas tendencias y, lo que es más importante, tener visibilidad de las áreas en las que pueden modificar sus enfoques para alinearse con las mejores prácticas y estar en una mejor posición para planificar lo inesperado”, dice el informe.
Aclara que cualquier tipo de propietario de activos puede utilizar este marco. A los más grandes les servirá para explorar áreas que quizá no tenían en el radar. Y lo mismo es aplicable para los más pequeños.
Otro punto que definen como “crucial” es comprender las fortalezas y debilidades competitivas en relación con el resto de los pares.
Aprender de los mejores
¿Quiénes son los mejores? El Foro Económico Mundial identifica seis rasgos que los definen:
– Diversidad de pensamiento. Esto se basa “en experiencias variadas y conocimientos especializados para acceder a perspectivas perspicaces”.
– Autoevaluación precisa. Se define como la capacidad y la voluntad de recurrir a las partes interesadas internas y externas para comprender y abordar las deficiencias de la organización.
– Compromiso con la visión estratégica. Que haya “una creencia compartida de que la acción actual sobre los factores que afectan la cartera a largo plazo dará como resultado mejores rendimientos ajustados al riesgo”.
– Transparencia. Cuentas claras. Comunicación clara. Tanto a las partes interesadas de la junta como a la alta dirección. No debe haber dudas sobre las creencias, la visión y los objetivos de los involucrados. Es la mejor forma de que los compañeros “se alineen y contribuyan al cumplimiento de las metas”.
– Cultura de innovación. Desarrollar nuevos conocimientos especializados, cuestionar las normas existentes, explorar temas y procesos de inversión emergentes…
– Colaborar. “Compromiso de compartir las mejores prácticas con pares y partes interesadas para que la industria evolucione más rápidamente, afectando positivamente las regulaciones y políticas”, apunta el informe.
Involucrarse en el cambio climático
La transformación verde lidera el mundo. Es una tendencia emergente en las empresas, y, por ende, en los inversores a la hora de seleccionar en qué compañías confían. “Esto significa no desinvertir por completo en ciertos sectores, como los combustibles fósiles, sino retirarse de ciertas empresas que no están tomando medidas serias para abordar la transición energética”, aclara.
Explica el documento que al “adoptar un enfoque selectivo para la desinversión, la comunidad inversora puede recompensar eficazmente a las empresas que están haciendo lo correcto”.
Además, las exposiciones a estas empresas respetuosas deberían beneficiar a los inversores a largo plazo.
En este momento, algunas de las áreas en auge son la agricultura sostenible, la infraestructura de energía renovable, robótica, fondos de ciberseguridad para ganar exposición a la evolución tecnológica…
“Tener planes sistemáticos para abordar estas complejas tendencias permitirá a los inversores posicionarse para capturar oportunidades y mitigar los principales riesgos. La autoevaluación precisa y la colaboración entre pares son componentes cruciales del viaje. Creemos que todos los propietarios de activos con una cultura de innovación, diversidad de pensamiento y un compromiso con una visión estratégica y transparencia tienen la capacidad de avanzar en el tratamiento de las tendencias”, sentencia el informe del Foro Económico Mundial.