Antonio José Chinchetru (ALN).- El abanico de partidos y organizaciones independentistas catalanas contempla todo el espectro político, desde la derecha hasta la extrema izquierda. ALnavío ha elaborado una guía para no perderse en el mar de nombres y siglas.
En el independentismo catalán conviven ideologías que van desde el centro-derecha o incluso la extrema derecha (si bien esta es minoritaria y no tiene representación parlamentaria alguna) hasta la ultraizquierda. ALnavío ha elaborado una guía para saber quién es quién entre las principales organizaciones que forman parte de esta compleja maraña.
No se ha incluido a Podem (rama catalana de Podemos), por no mantener una postura clara al respecto y tener entre sus miembros y dirigentes tanto a defensores del independentismo como a otros que son partidarios de un referéndum pactado con el Gobierno español.
Partidos del gobierno catalán
Junts Pel Sí (Juntos por el Sí): No se trata de un partido político, sino de una coalición electoral independentista presentada a los comicios autonómicos de septiembre de 2015 con el objetivo de impulsar la independencia. Está formada por Convergència Democràtica de Catalunya (CDC, de centro-derecha, luego refundada como Partido Demócrata Europeo Catalán), Esquerra Republicana de Cataluña, Demócratas de Cataluña (democristianos) y Moviment d’Esquerres (socialdemócratas). Se invitó a participar a la formación anticapitalista Candidatura de Unidad Popular (CUP), pero rechazó la oferta. Consiguió un total de 62 escaños.
Los partidos políticos miembros de la coalición se repartieron los escaños de la siguiente manera: CDC (actual PDeCat), 29; ERC, 20; Demócratas de Cataluña, 4, y Moviment d’Esquerres, 1. El resto de miembros del grupo parlamentario figuraba en las listas electorales como “independientes”. El equilibro de fuerzas ha tenido ligeras variaciones debido a algunas renuncias al acta de diputado.
A pesar de que el candidato a la presidencia de la Generalitat era Artur Mas, que ocupaba el cargo desde 2012, la ultraizquierdista CUP impuso como condición para apoyar un gobierno de Junts Pel Sí que estuviera encabezado por otra persona. El elegido fue Carles Puigdemont, muy cercano a Mas. Accedió al puesto en enero de 2016, cuando se llegó al acuerdo de investidura.
PDeCat representa el ala derechista del independentismo y está presidido por el expresidente catalán Artur Mas
Partido Demócrata Europeo Catalán (PDeCat): Representa el ala derechista del independentismo catalán y está presidido por Artur Mas. Nace en 2016 como refundación de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC) después de que este partido se viera salpicado por numerosos escándalos de corrupción. Los casos más destacados son los que implican a la familia del líder histórico de la formación y expresidente catalán, Jordi Pujol.
PDeCat nace tras la ruptura de la tradicional coalición formada por CDC, que se definía como nacionalista y liberal, con la democristiana Unió Democràtica de Catalunya (UDC), denominada Convergència y Unió (CiU) por la radicalización de las posturas independentistas de la primera bajo el liderazgo de Artur Mas, que presidió la Generalitat de Cataluña (el gobierno autonómico) de diciembre de 2010 a enero de 2016.
Otro factor que impulsó la conversión de Convergència en PDeCat fue el paulatino desgaste electoral sufrido tras tomar una postura abierta por el independentismo. Frente a los 62 diputados autonómicos (de un total de 135) logrados en 2010, en 2012 CiU consiguió 50 escaños. En los siguientes comicios regionales, de 2015, CDC se presentó dentro de Junts pel Sí (Juntos por el Sí), una coalición formada con Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y otros pequeños partidos que no tenían representación parlamentaria previa. Los 62 asientos logrados eran menos que los 69 que sumaban CiU y ERC en la anterior legislatura.
Esquerra Republicana de Catalunya (ERC): Partido de izquierdas abiertamente independentista fundado en 1931. Su actual líder es el vicepresidente de la Generalitat de Cataluña, Oriol Junqueras. Al igual que todos los partidos políticos españoles, estuvo proscrito durante la dictadura de Francisco Franco. Ya en democracia, su desempeño electoral ha sido muy cambiante en los comicios autonómicos. Si en las elecciones regionales de 2010 fue la quinta fuerza más votada, logrando sólo 10 escaños, dos años después lograría subir a un segundo puesto con 19. En la actualidad, 20 de los 62 diputados de Junts Pel Sí son representantes de ERC.
Defienden de forma abierta que una Cataluña independiente debe abarcar lo que ellos llaman ‘Países Catalanes’. Dentro de estos incluyen la totalidad de la Comunidad de Valencia y Baleares, junto a la zona orienta de Aragón y una pequeña porción de la Región de Murcia (todo ello en España), el Principado de Andorra, el Rosellón (departamento francés de los Pirineos Orientales) y la ciudad de Alguer (en el norte de la isla italiana de Cerdeña). En otras formaciones independentistas esta idea está presente, pero no de forma tan explícita.
En el ámbito internacional, ERC ha tomado partido de forma abierta por el régimen chavista en Venezuela. Su representante en el Congreso de los Diputados español, Joan Tardá, ha defendido al gobierno de Nicolás Maduro y ha votado en varias ocasiones contra declaraciones de esta Cámara condenando la existencia de presos políticos y la violación de los Derechos Humanos en Venezuela.
Demócratas de Cataluña: Escisión independentista de la formación democristiana Unió Democràtica de Catalunya (que desapareció en marzo de 2017 tras entrar en concurso de acreedores). Se constituyó oficialmente en noviembre de 2015. Sus impulsores, entre los que figuraban dos expresidentes del Parlamento autonómico, decidieron romper con UDC después de que esta pusiera fin a su tradicional coalición con Convergència Democràtica de Catalunya.
Moviment d’Esquerres (MES): Organización secesionista de ideología socialdemócrata fundada en enero de 2015 al fusionarse los partidos Nova Esquerra Catalana y Moviment Catalunya. Ambas formaciones surgieron, la primera en 2012 y la segunda en 2014, como escisiones independentistas del Partido de los Socialistas de Cataluña (PSC, organización asociada al PSOE y que le representa en dicha comunidad autónoma).
La ultraizquierda independentista
Candidatura de Unidad Popular (CUP): Representa el sector más ultraizquierdista del independentismo catalán. Son partidarios de una república socialista que incluya la totalidad de lo que llaman ‘Países Catalanes’. Profundamente anticapitalista, defiende la nacionalización de la banca, junto a la “colectivización de la propiedad privada” y “el cooperativismo como forma de economía social al servicio de los intereses populares”. Es contraria a la Unión Europea y propugna el impago de la deuda pública. Es, además, una de las fuerzas más activas en el fomento del discurso de odio al turismo que se ha extendido en Cataluña durante los últimos años. De hecho, han llegado a defender como “acciones simbólicas” el ataque violento a un autobús lleno de visitantes extranjeros en Barcelona y los daños a bicicletas de alquiler, muy usadas por los turistas, en la misma ciudad.
La CUP defiende la nacionalización de la banca y la colectivización de la propiedad privada
Sus posturas de ultraizquierda las trasladan al ámbito internacional, apoyando tanto al régimen chavista en Venezuela como a la dictadura comunista cubana. Sus concejales en el Ayuntamiento de Barcelona llegaron a mostrar carteles con el rostro del opositor venezolano Leopoldo López en los que le llamaban “asesino”, en una imagen que ellos mismos difundieron a través de Twitter. Era su manera de protestar por el hecho de que se votara si la ciudad de adhería a un manifiesto por los Derechos Humanos en Venezuela.
Las siglas CUP aparecen en escena en las elecciones municipales de 1979, las primeras de este tipo tras el fin de la dictadura franquista. Una coalición de grupúsculos de extrema izquierda presenta ese año su candidatura bajo ese nombre en varias localidades catalanas. Su inscripción como partido se produjo en 1987, si bien no comienza a convertirse en una fuerza con cierto peso hasta 2011, cuando logra 101 concejales repartidos en numerosos ayuntamientos. Logran entrar en el Parlamento autonómico en 2012, con tres diputados. En las elecciones de septiembre de 2016 aumentan su representación a 10 escaños, lo que les sitúa como sexto grupo político de la Cámara. A pesar de esto último, sin su apoyo Junts Pel Sí no podría haber formado gobierno.
Arran: Organización juvenil de ultraizquierda próxima a la CUP. Aunque orgánicamente no tienen vínculo oficial, están considerados como los ‘cachorros’ del partido anticapitalista. De hecho, algunos de sus miembros han formado parte de sus listas electorales. El grupo nace en 2012 al fusionarse otros anteriores con similares posicionamientos ideológicos. Como Candidatura de Unidad Popular, une la defensa del socialismo más extremo a la idea de unos hipotéticos Países Catalanes. Es la rama más violenta del actual movimiento independentista catalán. Además de asaltar la sede del Partido Popular en Barcelona, han protagonizado actos vandálicos contra un autobús turístico en Barcelona (amenazaron a los ocupantes, pincharon las ruedas), contra bicicletas de alquiler, bancos y locales del PP y Ciudadanos. En la manifestación independentista del 11 de septiembre de este año alcanzaron un gran protagonismo al quemar banderas de España, Francia y la Unión Europea.
Otras organizaciones
Al margen de las fuerzas políticas de corte tradicional, en el independentismo catalán juegan un papel fundamental otras organizaciones que se presenta como ‘sociedad civil’. A pesar de su declarada autonomía, están muy vinculadas a los grandes partidos secesionistas, hasta el punto de que hay trasvase de dirigentes entre unas y otros. El papel de estas asociaciones es sobre todo de movilización y organización de manifestaciones y otro tipo de actividades.
Òmnium Cultural: Es una de las dos grandes organizaciones independentistas que se presentan como ‘sociedad civil’, si bien ambas mantienen fuertes vínculos con el gobierno catalán. Aunque en la actualidad no recibe subvenciones de la Generalitat, sí lo hizo en el pasado. Es junto con la Asamblea Nacional Catalana la encargada de las grandes movilizaciones secesionistas. Fue fundada en 1961, en plena dictadura, con el objetivo declarado de promocionar el uso de la lengua catalana (que no tenía carácter de idioma oficial). El régimen franquista prohibió la asociación en 1963, si bien sus responsables acudieron a los tribunales y volvió a ser legalizada en 1967. Ya en democracia ha superado la actividad meramente cultural y es una importante plataforma del activismo independentista. En la actualidad cuenta con cerca de 68.000 socios.
Asamblea Nacional Catalana (ANC): Es la más moderna de las dos grandes organizaciones destinadas a la movilización social del independentismo. Fue fundada en marzo de 2012 y su primera presidenta fue Carme Forcadell, que actualmente ostenta la Presidencia del Parlamento autonómico. A diferencia de Òmnium Cultural, no declara tener fines culturales y nació con el objetivo declarado de avanzar hacia la creación de una república independiente que incluya todos los denominados ‘Países Catalanes’. Cuenta con unos 3.800 socios con derecho a voto y un número indeterminado de asociados y simpatizantes que pagan cuota pero no tienen derechos dentro de la organización. La ANC es partidaria de declarar la independencia de forma unilateral si no se celebra el referéndum del 1 de octubre.