Redacción (ALN) .- Durante las últimas semanas, el bolívar ha presentado una «fuerte depreciación» frente al dólar. ¿Pero a qué se debe que el tipo de cambio esté subiendo?
El economista José Guerra explicó durante una entrevista a Alnavío los dos aspectos fundamentales para que esto esté ocurriendo. Además, advirtió que viene un rebrote inflacionario en el país. «Eso quiere decir que la presión que ha causado la devaluación de la moneda se va a sentir muy pronto», aseguró.
A continuación la entrevista exclusiva que ofreció José Guerra a Alnavío:
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El bolívar ha estado en picada frente al dólar las últimas semanas. ¿A qué se debe esto? ¿Qué pasó con la estrategia del BCV?
La caída del bolívar se debe básicamente a dos aspectos. En primer lugar, es que claramente el Gobierno ha inyectado muchísimos bolívares para hacer pagos de nómina, principalmente, pero esa explicación por sí sola no es suficiente porque hay un tema de demanda de bolívares.
El público no quiere los bolívares, cuando les llegan les pican las manos y optan por deshacerse de ellos comprando bienes, en este caso dólares.
Entonces, está la inyección de bolívares al sistema a través del gasto y también que la gente repudia la moneda porque anticipa la inflación y la devaluación. Esos dos elementos son los que están explicando el comportamiento del tipo de cambio. A los cuales hay que agregar, desde mi punto de vista, que el BCV no tiene suficientes dólares para poder inyectar en cantidades apreciable para satisfacer la demanda.
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¿Hacia dónde va la situación económica del país? ¿En cuánto cree que podría llegar el tipo de cambio para finales de año?
Nadie sabe hasta donde podría llegar el tipo de cambio y quién lo diga es un irresponsable porque eso fluctúa diariamente. Lo que no tengo yo ninguna duda es que la tendencia del tipo de cambio será creciente. La duda no va a hacer si se devalúa o no, sino la forma en la que se devalúa si es de un brinco de 20 o 30% en un día o gradualmente como ha venido ocurriendo.
Las últimas semanas el tipo de cambio se ajustó. La semana pasada fue de 13% y si eso ocurre dos o tres semanas más estaremos hablando de una macro devaluación.
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¿Viene un rebrote inflacionario en el país? ¿A qué niveles cree que podríamos llegar?
Claramente viene un rebrote inflacionario. De hecho, la mediciones que hacemos nosotros de la canasta alimentaria, al menos en Caracas, la semana pasada que terminó el 21 de agosto; indican que los precios subieron en un conjunto de bienes de 17%.
Eso quiere decir que la presión que ha causado la devaluación de la moneda se va a sentir muy pronto y ya se está sintiendo en los precios de los bienes, especialmente en aquellos que están muy vinculados al dólar como los alimentos.
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Muchos venezolanos están sobreviviendo con el salario actual. ¿Cree que puede venir un nuevo reajuste estos próximos meses? A su juicio, ¿en cuánto se debería ubicar ese sueldo mínimo?
Para mí es incorrecto decir que el ajuste salarial es el que está provocando el alza del dólar o mejor dicho la devaluación de la moneda. Eso lo está causando es la política económica. La gente anticipa la devaluación, sabe que el Gobierno recurre a la devaluación y ese es el punto.
Ahora, el salario debe aumentar, pero para que aumente y no cause inflación tiene que financiarse de manera orgánica. Es decir, que el gobierno traiga las reservas en dólares que tiene en el exterior y que esas reservas se inyecten al sistema y se transformen en bolívares y eso permitiría un aumento del salario mínimo a los empleados públicos; porque los privados tienen su propia lógica de aumento y no causaría gran inflación.
De manera que yo sí estoy de acuerdo en un aumento salarial financiado con las reservas que tiene en el exterior el Gobierno y que no las quiere traer.
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¿Qué se necesita para que el venezolano vuelva a confiar en el bolívar?
La confianza en una moneda significa que la moneda reserva el valor adquisitivo y ese no es el caso del bolívar. Si el gobierno quiere que el bolívar se recupere como moneda hay que hacer una política antiinflacionaria pero no es esa política que salimos de una hiperinflación y caemos en una inflación alta de 130% o 140% al año. Eso es una ganancia muy insignificante porque con tres dígitos todavía de inflación en este mundo nadie confía en una moneda que mañana se sigue devaluando y está a la espera de seguirse devaluando porque el tipo de cambio de 6,94 bolívares no es el tipo de cambio; es mucho mayor y eso tarde o temprano va a empujar a la inflación y a la devaluación.
Las monedas son creíbles en tanto mantengan una paridad estable y fija con otra moneda; en este caso el bolívar contra el dólar.
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Por último, para muchos Venezuela se arregló… ¿Qué mensaje le enviaría a esas personas ante la actual situación del país?
Este cuento de que Venezuela se arregló evidentemente no se ha arreglado. Estaba en el sótano -20 y ahora está en el sótano -10. ¿Hay un crecimiento? Sí lo hay, pero un crecimiento después de cinco años de caídas brutales donde la economía perdió 80% de su tamaño y ni siquiera hemos llegado a los niveles de prepandemia.
De manera pues que ese cuento es propaganda. Además, la recuperación que hay está muy concentrada básicamente en el petróleo porque los niveles de producción han subido desde muy bajos niveles y el sector comercio.
Pero a partir de allí otras actividades fundamentales como la construcción, el sector agroalimentario y la industria manufacturera siguen absolutamente postrados. Entonces eso es propaganda que Venezuela se arregló.