María Rodríguez (ALN).- Una amnistía de la Asamblea Nacional de Venezuela a Nicolás Maduro podría agilizar y facilitar el proceso de transición en el país. Según analistas consultados por ALnavío esto “rebajaría el costo de salida para Maduro” y “profundizaría las grietas existentes en el régimen”. Esa sería la opción pacífica. Si Maduro opta por la violencia, “no tiene futuro”, dice el senador de EEUU Marco Rubio. En su primer discurso como presidente encargado, Guaidó pidió a los venezolanos que “repartan la Ley de Amnistía” a todos los militares, amigos y familia de militares de Venezuela”.
El reconocimiento de la comunidad internacional a Juan Guaidó como presidente encargado de Venezuela acorrala a Nicolás Maduro. Tiene una salida. La pacífica. Guaidó no descarta una futura amnistía a Maduro si este se coloca “del lado de la Constitución”. Funcionarios de Estados Unidos también se han manifestado en esta línea. En su primer discurso como presidente encargado, Guaidó pidió a los venezolanos que “repartan la Ley de Amnistía” a todos los militares, amigos y familia de militares de Venezuela”. Esta ley se difundirá por redes sociales este domingo. Guaidó insiste en que se imprima y se reparta.
Pero ¿por qué amnistiar a Maduro? Analistas consultados por el diario ALnavío destacan varias razones.
Guaidó pidió a los venezolanos que “repartan la Ley de Amnistía” a todos los militares, amigos y familia de militares de Venezuela”
La principal es agilizar el proceso de transición y facilitarlo. “Si Maduro cede, se aparta y se coloca del lado de la Constitución, la Ley de Amnistía busca ofrecer los canales políticos necesarios de negociación para que se celebren unas elecciones con garantías democráticas, auditadas, con todos los partidos políticos, sin presos políticos y con los exiliados de vuelta en el país”, explica al diario ALnavío el exministro y exdiputado venezolano Carlos Tablante.
En otras palabras, la hoja de ruta de Guaidó pasa por rebajar el costo de salida de Maduro. “Intentan ofrecer al régimen pactar un periodo de transición. Si el costo de salida para Maduro es muy alto (por ser perseguido y por riesgo de ser encarcelado), el deseo de pactar del oficialismo sería nulo”, apunta a este diario Rogelio Núñez, investigador del Instituto de Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Alcalá de Henares (Madrid).
No obstante, “hay que distinguir lo que pueden ser estrategias políticas para propiciar la salida de Maduro de la realidad”, advierte David Redoli, miembro del Consejo Directivo de la Asociación de Comunicación Política (ACOP). “Ahora lo que se intenta es plantear un escenario lo más suave posible para facilitar por cualquier vía que Maduro abandone pacíficamente el poder. Y es lo que tiene que hacer, porque hay que evitar una guerra civil”, insiste Redoli.
Es posible una fractura en la Fuerza Armada de Venezuela
El otro efecto de la amnistía pasa por “incentivar y profundizar las grietas que existen en el régimen, sean más o menos evidentes”, agrega Núñez. Una postura que comparte Tablante. Y es que, en palabras del exministro, “la amnistía busca ofrecer garantías a los que se coloquen del lado de la Constitución”.
Para Redoli es inevitable pensar que existen fisuras en el régimen de Maduro. “Lo que no sé es hasta qué punto esas grietas pueden hacer que erosionen totalmente los cimientos de este ‘Gobierno’. Ahora es una caja negra”, apunta.
¿Y si los militares sí están pensando en cambiar de bando? Evan Ellis, profesor del Instituto de Estudios Estratégicos del Army War College de EEUU, reflexiona sobre ello. En declaraciones a El Nuevo Herald este experto subraya: “Todos los militares saben lo que han hecho, pero en estos momentos se están diciendo ‘la Asamblea ha ofrecido inmunidad y si Guaidó gana, eso significa que [cooperar con la transición] es la mejor oportunidad que voy a tener en la vida para poder escapar con algo de dinero y libertad antes de que todo se derrumbe’”.
Para Maduro, la salida pacífica y amnistiada también puede ser la única solución porque, en palabras del senador republicano por Florida (EEUU), Marco Rubio: “Maduro no tiene futuro”. En una entrevista al canal EVTV de Miami, el senador subraya que ese régimen “ya se ha acabado” y que sólo quedan dudas sobre “cómo va a ser la salida de Maduro”; si pacífica, abandonando el control de los organismos que le quedan, o sangrienta. Si elige la segunda, “Maduro no tiene futuro (…) Maduro jamás va a ser presidente reconocido por EEUU y por la comunidad internacional”, subraya Rubio.
Para Mauricio Claver-Carone, directivo del Consejo de Seguridad Nacional de EEUU y asesor de Donald Trump, “Maduro tiene la oportunidad de que su legado sea el de aceptar una transición pacífica y buscar una salida. Nosotros estamos muy dispuestos a trabajar en buscar esa salida para que Venezuela pueda pasar la página y entre en un proceso democrático de libertad y prosperidad”. Así se expresó el funcionario en una entrevista con La Voz de América.
Un discurso de reconciliación
Lo que está claro y en eso coinciden todos los analistas consultados es que la amnistía propuesta de Guaidó es coherente con el discurso de paz, reconciliación y de tender la mano al otro que defiende el presidente encargado de Venezuela. “Al final es el único discurso viable, el que defienda soluciones consensuadas y pacíficas, si no pondría en juego el apoyo con el que ahora cuenta de la comunidad internacional”, explica Redoli.
Profundizando en este discurso sereno de Guaidó, ¿se asemeja al que defendía Nelson Mandela para acabar con el Apartheid en Suráfrica? Salvando las enormes distancias, podría ser, apunta Tablante. El exministro recuerda que cuando Mandela salió de la cárcel, después de casi tres décadas preso, dijo que el principal desafío era el perdón. “Creo que en Venezuela de lo que se trata es de propiciar un ambiente de reconciliación en un país que se está hundiendo por todo: violencia, crisis económica, ausencia de comida, enfermedades…”, concluye Tablante.