Redacción (ALN).- A finales de febrero pasado el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció la suspensión de la licencia que permitía las operaciones de la petrolera Chevron en Venezuela. La medida, que después de una revisión fijó el fin del permiso hasta el 27 de mayo, significó un duro golpe para el chavismo, que aspiraba a establecer una buena relación con el presidente demócrata.
Días antes de su decisión, Trump repitió que Estados Unidos no necesita del petróleo de Venezuela, país que por décadas fue uno de sus proveedores más confiables hasta el arribo del chavismo al poder en 1999.
“Probablemente vamos a dejar de comprar petróleo a Venezuela. No lo necesitamos”, dijo el mandatario tras afirmar que su país “tiene petróleo más que suficiente” para satisfacer su demanda interna.
Pero ¿realmente Trump no quiere el petróleo de Venezuela?
“Trump sí quiere el petróleo venezolano, esa negación representa en sí una afirmación”, dijo a Crónica Uno el analista Pablo Quintero.
De acuerdo con el experto, el mandatario estadounidense puso sus ojos en el llamado “oro negro” venezolano desde hace mucho tiempo, pero puede generar aún una negociación efectiva en vista de la “poca aceptación” que tiene Nicolás Maduro dentro de Estados Unidos y en la comunidad internacional.
Con este panorama eliminar la licencia a Chevron le permite a Trump producir condiciones para un nuevo acuerdo petrolero con Venezuela, en el marco de los desequilibrios que comienzan a aparecer en la economía mundial por los aranceles que impuso el propio Trump a casi todos los países del mundo.
“Este tipo de presión y estas restricciones buscan generar un mayor campo de negociación, de generar presión suficiente para negociar, para exigir y para de alguna forma doblegar a la otra parte de la mesa. Esto responde a un método de negociación”, dijo Quintero.
Una negociación sin peligros para Maduro
Quintero también apuntó que Trump ya demostró con sus acciones hacia Venezuela que le da “muy igual“ quien permanezca en el poder en el país sudamericano, siempre que Estados Unidos pueda emprender “relaciones transaccionales” sin problemas.
“Las medidas de Trump no buscan remover a Nicolás Maduro del poder”.
Recordó que el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, declaró en días recientes que no ve un cambio de gobierno en Venezuela en el futuro inmediato.
En la misma línea declaró el enviado especial de Trump para Venezuela, Richard Grenell, quien descartó que Trump persiga un cambio de gobierno en Venezuela.
El senador republicano de ascendencia colombiana, Bernie Romero, dijo en días pasados que Trump se entenderá con Maduro porque es quien está en el poder en Venezuela.
Es por ello que Quintero dijo a Crónica Uno que a Trump no le interesa el devenir de la política interna en Venezuela en este momento, aunque sí proceder con negociaciones de carácter económico y transaccional.
Trump ¿en guerra con Venezuela?
Las decisiones del presidente estadounidense contra Venezuela se producen en medio de su deseo de echar a los migrantes venezolanos en Estados Unidos.
Sin establecer diferencias entre delincuentes y personas de bien Trump señala a la migración venezolana, en general, de cometer delitos tipificados como terrorismo y de pertenecer a la banda transnacional Tren de Aragua, que el gobierno de Maduro considera extinta.
“La retórica y las formas del señor Trump son actuaciones de guerra, el instrumento que utiliza para facilitar las deportaciones es una ley de guerra”, dijo a Crónica Uno el activista social Jesús “Chuo” Torrealba sobre la ley de Enemigos Extranjeros de 1798, que en el país del norte solo se usó en tiempos de guerra y que ya sirvió al mandatario demócrata para expulsar a cientos de migrantes venezolanos.
Torrealba, al igual que Quintero, cree que al presidente estadounidense sí le interesa el petróleo de Venezuela y sobre todo tener bajo su órbita de influencia “al país que tiene cerca y que tiene el 20 % de las reservas mundiales de crudo”.
Esa es la razón de que, con sus medidas contra la industria petrolera de Venezuela, Trump intente poner a Venezuela en una “condición de máxima fragilidad“ económica, dijo Torrealba.
“Para luego poder hacer en Venezuela lo mismo que hizo (al presidente ucraniano) Volodímir Zelenski: ‘dame la mitad de tus minerales a cambio de mi apoyo’”.
Tomado de Crónica Uno.
Síguenos en nuestro canal de Telegram aquí