Daniel Gómez (ALN).- Vladímir Putin celebra las conversaciones de Nicolás Maduro con la oposición minoritaria y también alaba la normalización de las relaciones. Pero pide más. Y se lo pide en la cara a Maduro.
Nicolás Maduro ya tiene la bendición del presidente Vladímir Putin. “Rusia apoya consistentemente a todos los cuerpos de poder legítimos en Venezuela, incluida la institución de la Presidencia y el Parlamento. Y, sin duda, apoyamos el diálogo, que usted, señor presidente, y el gobierno mantienen con las fuerzas de la oposición. Consideramos cualquier negativa a mantener un diálogo como irracional y perjudicial para el país y que sólo representa una amenaza para el bienestar de la población”, le dijo Putin este miércoles en Moscú.
De la declaración de Putin, se extraen algunas conclusiones:
1-El presidente ruso bendijo “el diálogo” con la oposición, y se infiere que se trata de la más reciente iniciativa de Maduro con un sector de aquella, calificada de minoritaria.
2-Pero al recordar que cualquier negativa a conversar no tendría sentido y, además, sería dañina para Venezuela, se infiere también que es un mensaje para Maduro. Para que este amplíe la negociación e incluya al sector mayoritario. O sea, a Juan Guaidó y su equipo.
3-Putin no deja margen de duda. Reconoce a los cuerpos legítimos. Reconoce a Maduro, a la Presidencia, pero también al Parlamento, es decir a la Asamblea Nacional, tal como hicieron este martes los diputados chavistas al retornar al hemiciclo.
Esta declaración de Putin se produce luego del encuentro privado que celebraron ambos en Moscú. De modo que el asunto está más que discutido. No puede haber equívoco cuando Putin se refiere al Parlamento, es decir a la Asamblea Nacional de Guaidó, y no a la Asamblea Nacional Constituyente que preside el chavista Diosdado Cabello.
Cabe recordar que Rusia fue uno de los países que con más ahínco defendió las negociaciones entre Maduro y Guaidó facilitadas por Noruega. Y también cabe recordar que este martes en la Asamblea Nacional, en la sesión que marcaba el regreso de los diputados chavistas al Parlamento legítimo, Guaidó dijo que tarde o temprano, Maduro tendría que retomar el mecanismo de Noruega. Por eso Putin tal vez insiste en la negociación en los términos de que este no debe interrumpirse.
El martes, cuando arribó Maduro a Moscú, el mandatario ruso dijo: “Sabemos que la situación en Venezuela sigue siendo complicada. Apoyamos sus esfuerzos dirigidos a lograr un entendimiento en la sociedad. Y todas sus acciones encaminadas a la normalización de las relaciones con la oposición”.
Está claro que Putin quiere más. Sin embargo, Maduro logró la bendición a la iniciativa del “diálogo” que emprendió con un sector de la oposición.
Y está claro que el encuentro en Moscú es fundamentalmente un espaldarazo político a Maduro, justo cuando en la Asamblea General de la ONU es el centro de la controversia y los discursos.
En la reunión de este miércoles, Maduro también tuvo buenas palabras para Putin. Dijo estar “muy cómodo” y “muy feliz” en Moscú. “En medio de las dificultades podemos avanzar juntos. Hemos mantenido mapa integral de cooperación. En mayo pasado comisión mixta de alto nivel. Muchos temas se han avanzado exitosamente. En todos los campos. Salud, energía, y en otros campos que se están abriendo. Es muy importante esta reunión casi finalizando este año para hacer un balance y proyectar los años futuros”.
Cabe recordar que el Kremlin confirmó que Putin no firmaría ningún acuerdo con Maduro. Lo dijo el martes, antes de que aterrizara el avión de Maduro.
