(EFE).- La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) defendió este lunes que su política petrolera «proactiva y preventiva» contribuye a estabilizar el mercado mundial de crudo, y aseguró que la mantendrá en el futuro.
La OPEP hace esta defensa propia en su informe mensual sobre el mercado, después de que el pasado día 1 entrara en vigor un polémico y fuerte recorte de su bombeo, pactado junto a sus aliados, entre ellos Rusia, que enfrió las relaciones entre Estados Unidos y Arabia Saudí.
El documento destaca los «riesgos a la baja» que pueden mermar la demanda energética mundial por factores de incertidumbre como la invasión rusa de Ucrania, las restricciones con las que China busca combatir los brotes de covid y la inflación.
«Para hacer frente a esta importante incertidumbre y a la mayor volatilidad del mercado, las decisiones proactivas y preventivas de la OPEP y los países productores no pertenecientes a la OPEP (…) seguirán contribuyendo a la estabilidad del mercado mundial del petróleo», asegura el informe.
TENSIONES CON WASHINGTON
Liderada por Arabia Saudí y Rusia, la llamada OPEP+ (OPEP y aliados) sorprendió a los mercados el pasado 5 de octubre al anunciar un recorte de su producción de 2 millones de barriles diarios (mbd), equivalente al 2 % de la oferta mundial de petróleo.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, que llevaba meses pidiendo un aumento de los suministros para abaratar la energía y frenar la inflación, anunció poco después que revisaría su relación con Arabia Saudí, a la que acusó de alinearse con Rusia contra los intereses estadounidenses.
El recorte, cuyo anuncio impulsó alzas en los «petroprecios», tampoco cayó bien en la Unión Europea, necesitada de fuentes alternativas al crudo ruso ante el embargo a las importaciones por vía marítima del petróleo vendido por Moscú que comenzará a aplicar en diciembre.
DESACELERACIÓN DE LA DEMANDA
En línea con la decisión adoptada, la OPEP revisó hoy a la baja, por quinta vez desde abril, su pronóstico sobre el crecimiento de la demanda petrolera mundial hasta fines de 2023.
El informe, el último que se publica antes de la próxima reunión de la OPEP+ del 4 de diciembre, vaticina que el mundo consumirá una media de 101,82 mbd de crudo en 2023, 200.000 bd menos de lo calculado hace un mes.
Destaca que «la importante incertidumbre en torno a la economía mundial, acompañada del temor a una recesión global, contribuye al riesgo a la baja de reducir el crecimiento de la demanda mundial de petróleo».
«Los riesgos a la baja incluyen la alta inflación, el endurecimiento de las políticas monetarias de los principales bancos centrales, los elevados niveles de deuda soberana, el endurecimiento de los mercados laborales y las persistentes limitaciones de la cadena de suministro», precisa.
OFERTA LIMITADA
En cuanto a la oferta de crudo, la de fuera de la OPEP totalizará 65,68 y 67,12 mbd este año y el próximo, respectivamente, según el documento.
La OPEP, por su parte, comenzó en octubre a cerrar los grifos: su producción conjunta bajó hasta 29,49 mbd en octubre, 210.000 bd menos que en septiembre.
Para 2023, la organización calcula que el mundo requerirá de sus 13 socios una media de 29,26 mbd.