(EFE).- La presidenta Dina Boluarte se sometió el año pasado a una cirugía que no hizo pública, según confirmó su ex primer ministro Alberto Otárola, quien consideró que no hubo vacío de poder, pese a la condición médica de la mandataria y no contar con vicepresidentes para asumir de forma temporal el cargo.
Otárola fue citado en la Comisión de Fiscalización del Congreso para declarar sobre el conocido como ‘Caso cofre’, que investiga la supuesta implicación de Boluarte en la fuga del político prófugo Vladimir Cerrón, líder del partido marxista en el que la jefa de Estado militaba hasta 2022.
Entre las preguntas al expresidente del Consejo de Ministros, los congresistas cuestionaron la ausencia de la presidenta entre los últimos días de junio y primeros de julio de 2023, en los que según medios periodísticos, se sometió a una rinoplastia.
«Como es de conocimiento público, la señora presidenta de la República, en las fechas indicadas, pasó por un procedimiento quirúrgico, pero en este procedimiento, como le sucede a cualquier persona, no estuvo desatendiendo mucho menos las labores que le competían al cargo y me consta porque yo fui en ese momento presidente del Consejo de Ministros», declaró.
Explicó que la mandataria se realizó la intervención por un «problema respiratorio», y que, tras el proceso posoperatorio, Boluarte se mantuvo en contacto permanente con él.
«No se produjo, desde mi punto de vista, ningún vacío de poder, sabíamos que se iba a hacer una intervención quirúrgica. Siempre manteníamos comunicación telefónica con la presidenta Dina Boluarte», sostuvo el ex primer ministro, quien ocupó este cargo desde diciembre de 2022 hasta marzo de 2024.
Tras las declaraciones de Otárola, el congresista y miembro de esta comisión, Carlos Zeballos, dijo a la prensa que la presidenta no mandó al Legislativo ninguna solicitud para autorizar el ejercicio de funciones desde fuera de Palacio de Gobierno, como sucede cuando la mandataria sale del país.
«Hay un vacío legal que tenemos que ver acá en el Congreso. Ella no puede dejar acéfalo el gobierno porque no tiene un vicepresidente», expresó al agregar que tendría que haber habido comunicación al Congreso sobre su situación de salud y que tampoco presentó un certificado médico que justifique su ausencia temporal ni detalles sobre cuánto tiempo duró su recuperación.
Añadió que Boluarte podría haber actuado sin la debida aprobación del Congreso, lo que añade a la situación de negligencia.
«Vamos a investigar, solicitar la documentación necesaria. De hallar las evidencias concretas, yo creo que habría una causal de vacancia», indicó.
De la misma forma, el presidente de la comisión, Juan Burgos, dijo a los medios que Boluarte debería haber solicitado permiso al presidente del Congreso, como hace cuando quiere viajar fuera del país.
Boluarte no tiene vicepresidentes porque ejercía ese cargo cuando Pedro Castillo fue destituido por el Congreso, el 7 de diciembre de 2022, tras intentar dar un golpe de Estado, lo que llevó a que asumiera la jefatura del Estado por sucesión constitucional.
Ante la imposibilidad para salir del país al comienzo de su mandato, el Ejecutivo envió al Congreso un proyecto de ley que fue aprobado por el pleno para permitir que se mantenga al frente del despacho presidencial de manera remoto y usando las tecnologías digitales.
La Constitución de Perú indica que en caso de «impedimento temporal o permanente» del presidente de la República, asume sus funciones el primer vicepresidente, en defecto de éste, el segundo vicepresidente, y, si no, el presidente del Congreso.