Juan Carlos Zapata (ALN).- Vienen más sanciones por parte de los Estados Unidos. Vienen más sanciones contra funcionarios del régimen de Maduro. Vienen más sanciones contra familiares, hijos, testaferros, de figuras vinculadas al régimen de Maduro. Vienen más sanciones contra Cuba. E inclusive, pueden llegar sanciones contra Rusia. Y todo porque los Estados Unidos quieren acelerar el cambio político en Venezuela.
Las nuevas sanciones que serán anunciadas en las próximas horas tienen que ver con la negociación entre Juan Guaidó y Nicolás Maduro. Tienen que ver con el punto que tranca el acuerdo. Y este no es otro que las elecciones presidenciales sin Maduro en el poder. En ese punto enfatiza Estados Unidos. No da marcha atrás. Mientras, Maduro piensa otra cosa. O varias cosas. Una de ellas es elecciones presidenciales pero con él en el poder. Allí se mantiene firme.
Y hoy jueves serán anunciadas las sanciones. Maduro rechaza las sanciones, por supuesto. Maduro rechaza las presiones. De Estados Unidos. De Europa. Maduro señala que eso es extorsión porque Estados Unidos y Europa buscan resultados urgentes en la negociación. Rusia en cambio se opone a las sanciones contra Maduro, y aunque apoya la negociación, apunta que no se debe imponer nada, que no se debe perturbar la ruta de la negociación.
Maduro no quiere pasar a la historia como el chavista presidente que cedió el poder en una negociación.
Por ello, si hay elecciones, tienen que realizarse con él gobernando.
Porque Maduro quiere ser reconocido como legítimo.
Porque Maduro quiere vender cara la derrota, si es que hay derrota.
Porque Maduro piensa que con un candidato como el gobernador de Miranda, Héctor Rodríguez, puede ganar.
Eso piensa Maduro y otra cosa piensa Washington. No es posible. No es concebible realizar las elecciones con Maduro en el poder. De allí las nuevas sanciones. Ya lo adelantamos, los equipos de Nicolás Maduro y Juan Guaidó extendieron esta semana las consultas porque se ha llegado a este punto crucial, que es el que determina el acuerdo. Si el acuerdo va o no va.
Dice Elliott Abrams: “Estamos tratando de cortarle el flujo de fondos al régimen, y creo que estamos teniendo un impacto bastante considerable. La presión continuará”.
Y hoy jueves serán anunciadas las sanciones. Maduro rechaza las sanciones, por supuesto. Maduro rechaza las presiones. De Estados Unidos. De Europa. Maduro señala que eso es extorsión porque Estados Unidos y Europa buscan resultados urgentes en la negociación. Rusia en cambio se opone a las sanciones contra Maduro, y aunque apoya la negociación, apunta que no se debe imponer nada, que no se debe perturbar la ruta de la negociación.
Las sanciones pueden seguir la misma línea que apuntó hacia el hijo de Nicolás Maduro, Nicolasito Maduro Guerra. Estados Unidos ha sancionado militares, funcionarios, instituciones, ministros, testaferros, torturadores, violadores de los derechos humanos, boliburgueses, etc. Pero ahora va por la familia. Por los hijos de los jerarcas, tal como pasó con el hijo de Maduro. Este es un asunto delicado para los hijos y familias que viven en el exterior.
A Maduro le están proponiendo, dicen fuentes, que cierre el ciclo. Pero Maduro se siente respaldado por Rusia y Cuba. El mismo Abrams reconoce que ambos apoyos son importantes para Maduro. Porque Cuba lo protege. Porque Rusia lo está ayudando a vender el petróleo. Dijo Abrams que “el papel ruso es en parte psicológico y político”. Rusia bloquea las iniciativas contra Maduro en el Consejo de Seguridad de la ONU y Maduro, dice Abrams, tiene “la sensación de que hay un gran país que lo respalda”. Desde La Habana, este miércoles, Rusia y Cuba cerraron filas con Maduro. Así lo manifestaron en rueda de prensa los cancilleres Serguéi Lavrov y Bruno Rodríguez.