Daniel Gómez (ALN).- No es casualidad que los marineros del USS Kidd, el buque de EEUU designado para la operación antinarcóticos del Caribe, estén fabricando mascarillas para la tripulación. El objetivo no es sólo protegerse del coronavirus, sino evitar otro incidente como el ocurrido con el portaviones estadounidense Theodore Roosevelt, el cual provocó la dimisión del secretario interino de la Marina de EEUU, Thomas Modly.
“Los marineros asignados al destructor de misiles guiados USS Kidd de la clase Arleigh Burke hacen máscaras faciales de tela para la tripulación. De acuerdo con las nuevas directivas, los marineros usarán máscaras cuando el distanciamiento social no sea posible para ayudar a mitigar la propagación y prevenir Covid-19”, informó este miércoles el Comando Sur de Estados Unidos.
El Kidd es el buque destructor asignado para la operación antinarcóticos del Caribe, que tiene como foco detener los negocios ilícitos del régimen de Nicolás Maduro.
Estos días el barco ha estado realizando maniobra por mar y aire con el resto de cuerpos asignados al operativo. Y como se ve, el coronavirus también les obliga a tomar medidas excepcionales de seguridad. Pero esto no sólo está motivado por el coronavirus.
Sailors assigned to Arleigh Burke-class guided-missile destroyer USS Kidd (DDG 100) make cloth face masks for the crew. In accordance with new directives, Sailors will wear masks when social distancing may not be possible to help mitigate the spread and prevent COVID-19. pic.twitter.com/RHednqsHWP
— USNAVSO_4THFLT (@NAVSOUS4THFLT) April 8, 2020
Este martes dimitió Thomas Modly, secretario interino de la Marina de EEUU. Modly había estado desacreditando al capitán Bett Crozier, quien paralizó la actividad del portaviones Theodore Roosevelt y sus 4.865 marineros designados a Vietnam por detectar un brote de Covid-19.
Para detener la misión, Crozier compartió una carta a sus superiores en el Pentágono que se filtró al diario San Francisco Chronicle el pasado martes, 31 de marzo. La carta decía: “No estamos en guerra. Los marineros no necesitan morir. Si no actuamos ahora, no estamos cuidando adecuadamente nuestro activo más confiable: nuestros marineros”.
La primera respuesta del secretario Modly fue decir que Crozier había sido sobrepasado por el desafío. El reto de “mantener nuestros barcos desplegados en el mar y en marcha, incluso con casos activos de Covid”.
Pese a las críticas del superior, el capitán Crozier insistió y logró la autorización para atracar el barco en Guam y que su tripulación fuera atendida por profesionales. Su rebeldía le salió cara. Fue relevado del mando de manera inmediata por parte del secretario Modly.
La tripulación despidió a su capitán como un héroe. Recibió aplausos y vítores cuando abandonó el barco, pero pronto fue blanco de insultos por parte de Modly. En un discurso con la tripulación del Theodore Roosevelt acusó de “traición” a Crozier y afirmó que era “demasiado ingenuo o estúpido” en referencia a la filtración de la carta. Lo que no sabía el superior Modly es que también se filtraría un audio suyo con las críticas al capitán.
Esta es la fuerza mar, tierra y aire que emplea EEUU en la operación contra Maduro
Aunque inmediatamente después de que se dieran a conocer sus palabras Modly se retractó y pidió perdón, era demasiado tarde. La polémica había llegado al Despacho Oval. De hecho, el lunes le preguntaron al presidente, Donald Trump, por la controversia y prometió intervenir. “Soy bueno para resolver discusiones”, advirtió Trump.
Un día después Modly presentaba su renuncia.
Además de generar un culebrón que ha dado la vuelta al mundo, y que ha puesto entredicho la actuación de la Marina, el caso del portaviones Theodore Roosevelt ha generado “nuevas directivas” para las tripulaciones por parte del Pentágono. Así lo apuntó el Comando Sur en su comunicado. Y el resultado de esas nuevas directivas, sobre las que no se ofrecen más detalles, es una mayor protección a los militares en misiones.
No es casualidad, por tanto, que en el destructor Kidd designado para la operación en el Caribe elaboren mascarillas, ni que en las fotos que divulga el Comando Sur de repente todos los marines aparezcan con mascarillas. Esto no era así el lunes ni el martes, cuando la tripulación salía en fotos con la cara descubierta. Sin embargo, este miércoles se revirtió la tendencia.
Por desgracia para los narcos, el operativo en el Caribe sigue en marcha puesto que no se han reportado casos de coronavirus.
No ocurrió igual con el portaviones Charles de Gaulle, de la Armada de Francia. Este buque, desplegado en el Atlántico para la operación Foch (un ejercicio de cooperación con socios de la OTAN) está de regreso a la Base Naval de Toulon porque 40 de sus 2.000 marineros “son casos sospechosos de coronavirus”, informó el portal Naval News.