Redacción (ALN).- Hay dos motivos. Haber superado la cuota es una señal por parte de Ecuador de que podría producir más crudo para cubrir los déficits de países como Angola y Venezuela, según explica el banco de inversiones Torino Capital. Y por otro lado está el papel del gobierno de Lenín Moreno, quien cambió el enfoque que había con Rafael Correa para incentivar al sector privado.
Unos suben y otros bajan. Así es la vida. Mientras la producción petrolera de Venezuela cayó a 1,28 millones de barriles al día en julio (47.000 menos diarios), en Ecuador aumentó a 525.000 barriles cada día, según datos de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP). Algo que, de acuerdo con el último informe del banco de inversiones Torino Capital, muestra que Quito comienza “a aprovechar la flexibilidad en el cumplimiento de las cuotas OPEP”.
Cabe destacar que la producción de crudo de Ecuador se elevó el mes pasado por encima de la cuota OPEP del país, establecida en 522.000 barriles diarios.
Para Torino Capital, la importancia de este aumento tiene que ver con el hecho de que llega sólo unos días después de que la OPEP acordó el 22 de junio un modesto aumento de la producción de petróleo. El visto bueno se produjo una vez que el líder del cartel, Arabia Saudí, persuadió a su archirrival Irán para cooperar luego de que las grandes naciones consumidoras de crudo advirtieron sobre una posible escasez de suministros.
“La administración de Lenín Moreno ha revisado significativamente el enfoque de su predecesor Rafael Correa”
“La decisión fue tomada por muchos países miembros como una señal de que podrían producir más para cubrir los déficits por los bajos niveles de producción en países como Angola y Venezuela”, recuerda el informe. Entonces, como consecuencia de aquella decisión, ocho países elevaron la producción de crudo en julio. Y cinco de estos superaron el nivel de sus cuotas. Fueron Argelia, el citado Ecuador, Irak, Kuwait y Emiratos Árabes Unidos.
En el caso de Ecuador, entender por qué elevó la producción pasa por el cambio de Gobierno. Así lo dice Torino Capital: “La administración de Lenín Moreno ha revisado significativamente el enfoque de su predecesor Rafael Correa con el fin de promover nuevas modalidades de inversión como los contratos de producción compartida. Es una forma de crear incentivos para una mayor participación del sector privado”.
Por ejemplo, en lo que respecta a la refinería de Esmeraldas, el informe critica que Correa dejó la planta “en estado crítico en medio de acusaciones de corrupción”.
Ahora, en la nueva etapa que vive Ecuador desde que Moreno llegó al poder en mayo de 2017, las cosas están cambiando. De hecho, el viceministro de Petróleo ecuatoriano, Patricio Larrea, y el director de Petroamazonas, Álex Galárraga, anunciaron la semana pasada que el Gobierno planea recibir una inversión de 1.400 millones de dólares en los próximos cinco años para varios campos petroleros.
Nada que ver con lo sucedido en la época de Correa, cuando la producción de las compañías privadas cayó constantemente, sobre todo debido al declive de campos.
Asimismo, el Gobierno ecuatoriano estableció el pasado 17 de agosto contratos de 727 millones de dólares por 10 años con empresas de México, Venezuela y Ecuador para desarrollar cuatro campos de extracción de crudo en la Amazonía (Ver más:Ecuador atrae 727 millones de dólares de inversión para campos de petróleo).
Sin embargo, las exportaciones de crudo se han mantenido relativamente estables, según los datos oficiales. En junio, las ventas al exterior registraron un descenso de 3,7%, alcanzando 361.000 barriles diarios. Según Torino Capital, si las exportaciones no se recuperan con fuerza es por el fuerte aumento de la demanda interna, sobre todo de gasolina y diésel.