María Rodríguez (ALN).- Según el programa nacional cubano de inversiones turísticas, en 2030 habrá más de 100.000 plazas de alojamiento. Para cumplir con esta cifra, ayudará la inauguración “en el medio plazo” de 40 hoteles, actualmente en construcción, que sumarán 18.000 nuevas habitaciones a las casi 70.000 ya disponibles.
La planta hotelera cubana sigue imparable. En apenas cuatro meses Cuba ha pasado de contar con 68.000 habitaciones turísticas a 69.500, según datos difundidos por Granma, diario oficial del Partido Comunista de Cuba. Un gran empujón para superar los 5 millones de turistas en 2019, la meta prometida hace un año. Y lograr por primera vez 3.000 millones de dólares de ingresos en el sector, 17% más que en 2018.
Según el programa nacional cubano de inversiones turísticas, en 2030 habrá más de 100.000 plazas de alojamiento. Para cumplir con esta cifra, ayudará la inauguración “en el medio plazo” de 40 hoteles, actualmente en construcción, que sumarán otras 18.000 nuevas habitaciones, tal como informó Granma. La mayoría están situados en La Habana y Varadero, lugares clave para el turista que llega a Cuba.
Según el programa nacional cubano de inversiones turísticas, en 2030 habrá más de 100.000 plazas de alojamiento
En mayo, cuando se celebre en La Habana la Feria Internacional de Turismo (FitCuba 2019), se anunciará la apertura de una docena de nuevos alojamientos en la capital y la reincorporación de más de 1.120 habitaciones que permanecían fuera de servicio.
En la capital cubana actualmente se están construyendo siete nuevos hoteles de lujo, y rehabilitándose otros 12, entre ellos los célebres Riviera y Habana Libres, de las cadenas españolas Iberostar y Meliá, respectivamente, según informó la agencia EFE.
El emblemático Hotel New York, ubicado muy cerca del pórtico del Barrio Chino en La Habana Vieja, se incluye entre las cinco edificaciones patrimoniales por reconstruir en la ciudad, que cumple 500 años en noviembre.
El país caribeño ya recibió el primer millón de turistas extranjeros a comienzos de marzo, cinco días antes que en 2018. Otra señal más que augura una buena cifra de turistas al cierre de 2019.
Como informó el director de ALnavío, Juan Carlos Zapata, existe un inventario de miles de proyectos que pueden requerir inversiones por más de 10.000 millones de dólares. Con mucho espacio para el turismo, pero también para infraestructuras, transporte y telecomunicaciones.
La crisis del chavismo en Venezuela y Nicaragua favorece la inversión española en Cuba
Y todo ello “a pesar de las zancadillas de Estados Unidos”, según el Ministerio de Turismo cubano. Cabe recordar que Estados Unidos recomienda a sus ciudadanos no viajar al país tras una serie de incidentes de salud que afectaron a diplomáticos estadounidenses en La Habana.
Granma insiste en que “la advertencia” de Estados Unidos a sus nacionales y el aumento de las restricciones de los viajes a la isla son “patrañas” que “sabotean los esfuerzos de Cuba por salir adelante en su desarrollo económico y social”.
El esfuerzo de Cuba por atraer inversión extranjera en estos dos últimos años ha sido intenso. En 2016 celebró la Feria Internacional de La Habana que atrajo a 60 países, y en la que se ofreció de todo. Hasta de Estados Unidos hubo representación, siguiendo la línea del deshielo Obama-Castro, ahora puesta en el congelador con Donald Trump. La nueva Ley de Inversión Extranjera ofrece ventajas y con ella Cuba intenta convencer. Y convencer con la ley y el discurso. Porque había que escuchar a Raúl Castro antes de abandonar la Presidencia, y a los ministros de Castro, exponer las ventajas y la necesidad y la urgencia de la inversión extranjera. Castro llegó a decir que no se puede distribuir la riqueza que no se ha creado. Para crearla se requiere de lo que Cuba no dispone: capitales y experticia empresarial. Y esto se traduce en inversión. En empleo. En riqueza.
El turismo es la segunda fuente de ingresos de Cuba por detrás de la venta de servicios profesionales al exterior, y contribuye en 10% al Producto Interior Bruto, generando medio millón de empleos.