Antonio José Chinchetru (ALN).- La inestabilidad política generada por el independentismo está pasando factura a la economía catalana. Aunque repercutirá de forma negativa en el conjunto de España, en esa comunidad lo hará con mayor dureza que en el resto del país. BBVA Research ha rebajado en siete décimas la previsión de crecimiento del PIB de Cataluña: hasta un 2,1% en 2018 y un 2% en 2019, lo que la colocaría como la región española con una peor evolución este año y el que viene.
El desafío independentista sigue lastrando la economía de Cataluña, haciendo que el crecimiento de su Producto Interior Bruto (PIB) pierda siete décimas en 2018, según las previsiones de BBVA Research. Si este centro de estudios estimaba hace seis meses que el PIB de la región se incrementaría un 2,8% en 2018, en su última proyección rebaja este aumento hasta un 2,1% este ejercicio y un 2% en 2019. Esto sitúa a Cataluña en el último vagón del crecimiento en España.
Cataluña crecerá cuatro décimas menos que la media española en el presente ejercicio y tres décimas inferior en el próximo
El Observatorio Regional de BBVA Research, hecho público la semana pasada, estima que el PIB español crecerá un 2,5% este año y un 2,3% en 2019. Esto supone que el incremento en Cataluña será de cuatro décimas menos que la media nacional en el presente ejercicio y tres décimas inferior en el próximo. No sólo eso. También será la comunidad autónoma con peor evolución. En los puestos de cola le acompaña Asturias. La economía de esta región crecerá un 2,3% (dos décimas más que la catalana) en 2018 y un 2% (igual que la de Cataluña) en 2019.
En el extremo opuesto se sitúan las Islas Baleares (3% en 2018 y 2,6% en 2019) y la Comunidad de Madrid (2,7% en ambos ejercicios). Otras regiones que destacan por las buenas previsiones de su desempeño son las Islas Canarias (2,9% y 2,5%), País Vasco (2,8% y 2,5%) y Navarra (2,8% y 2,4%).
Según el estudio de la economía catalana publicado por BBVA Research este lunes, el PIB de la región aumentó un 3% en 2017. A pesar de que esto representa un punto más que su crecimiento medio desde 1991, implica que el incremento fue una décima inferior al registrado en el conjunto del país.
Además, fue tres décimas menos de la previsión que realizó el centro de estudios de la entidad presidida por Francisco González seis meses antes. Según el análisis, el empeoramiento registrado en el segundo semestre del año pasado se debe a los atentados terroristas de Barcelona y Cambrils los días 17 y 18 de agosto y al “aumento de la tensión política en los meses de octubre y noviembre y sus efectos sobre la incertidumbre en la política económica”.
Los atentados repercutieron de forma negativa en el sector turístico. El desafío independentista también ha afectado esta actividad y además ha impactado sobre “el consumo de bienes duraderos y en las señales hasta ahora disponibles de inversión”. Estos “acontecimientos de carácter no económico” han lastrado el crecimiento catalán en el segundo semestre de 2017 pero sus efectos se van a notar todavía más este año y el que viene, según BBVA Research.
Cataluña va a ser donde menos avance el PIB per cápita en este bienio
Cataluña no sólo va a quedar relegada al último vagón del crecimiento en el conjunto de España. Le va a ocurrir lo mismo en términos de PIB per cápita, una vez recuperado en 2017 el nivel anterior a la crisis. Según BBVA Research, va a ser donde menos avance en términos constantes en el bienio, un 2,3% si se cumplen las previsiones de población del Instituto Nacional de Estadística.
Efectos sobre otras regiones de España
La reducción del ritmo de crecimiento de la economía catalana tendrá un impacto negativo directo sobre la evolución del resto de las regiones, según el estudio. Las más afectadas serán las que tienen una mayor relación comercial con dicha comunidad autónoma, que son Aragón (con la que limita al oeste) y la Comunidad Valenciana (con la que limita al sur).
El incremento del PIB se reducirá entre tres y cuatro décimas en 2018, para situarse en un 2,4%. El impacto sobre el otro gran motor económico de España, la Comunidad de Madrid, será entre dos y tres décimas. Las comunidades que se verán menos afectadas, entre una y dos décimas, serán Extremadura (que crecerá un 2,4%) y Castilla y León (2,7%).