Elizabeth Fuentes (ALN).- Reciben órdenes, aíslan al usuario del mundanal ruido y se callan cuando es necesario sin que nadie se lo indique: los audífonos inteligentes traspasan la frontera de lo imaginable.
El tamaño sí importa, al menos en los novedosos audífonos que se presentaron en el Consumer Electronic Show (CES) realizado recientemente en Las Vegas. Los fabricantes compitieron por sorprender no sólo con modelos cada vez más sofisticados, sino con una “autonomía de vuelo” que los podría transformar en un aparato casi imprescindible para los amantes de la música y el sonido impecable.
Dos de las marcas más conocidas por los entendidos, como Bowers & Wilkins y JBL, se destacaron por novedades que dejaron boquiabiertos a los asistentes. Ambos inalámbricos y de gran tamaño, buscan el favoritismo de los fanáticos a punta de imaginación y alta tecnología.
Los nuevos audífonos leerán las notificaciones que lleguen al smartphone
Por ejemplo, el JBL Everest integra Google Assistant, el asistente virtual con el cual el usuario podrá interactuar y obtener toda la información que le interese sin mover un dedo. O moverlo una sola vez, porque basta con tocar los sensores ubicados en el exterior del auricular para que se activen los comandos de reconocimiento de voz. Y de allí en adelante se podrá subir el volumen, cambiar de canción y hasta escuchar las notificaciones del smartphone sin necesidad de mirarlo. Y todo, por supuesto, con un sonido impecable gracias al Pro Audio Sound, que ha caracterizado a la marca.
La mala noticia es que el JBL Everest sólo estará disponible para finales de este año, cuando saldrá en ambas versiones, el intraural (el pequeño que va dentro del oído) y el más grande, del cual ya se ha dejado colar el precio, 249 euros, un poco más económico que su archirrival, el PX de Bowers & Wilkins, que alcanza los 399 euros gracias a muchas de las virtudes que han expuesto sus anunciantes.
Controlado por instintos
Con una promesa básica, la marca Bowers & Wikins aspira enamorar a los melómanos en la búsqueda del sonido perfecto: sus audífonos PX se controlan por instinto. Es decir, usted se los pone y se activan, se los quita y enmudecen. Se los cuelga al cuello y se pondrán en pausa. “Es como si fueran una extensión de usted, se anticipan a la perfección a sus necesidades”, reza el anuncio.
Los JBL se pueden usar sin cable hasta por 22 horas, que es lo que dura la batería
Y por si esto fuese poco, incluyen un sistema de cancelación de ruidos a la carta: para avión (bloquean el rugir de los motores y minimizan el de la cabina), para la ciudad (bajan el sonido pero le permiten estar alerta a lo que sucede a su alrededor) y para la oficina, donde limitan el ruido pero permiten escuchar si el jefe lo llama, por ejemplo. Funciones todas que se pueden obtener mediante una aplicación gratuita.
Y si bien pesan 300 gramos, su diseño permite plegarlos y, como los JBL, se pueden usar sin cable hasta por 22 horas, que es lo que dura la batería.