(EFE).- Docentes venezolanos se concentraron en Caracas para exigir, en el Día del Trabajador Universitario, la recuperación del poder adquisitivo a través de mejoras salariales, ya que, afirman, devengan entre cinco y ocho dólares mensuales al cambio en bolívares, la moneda local, que se ha depreciado desde el último aumento del salario mínimo, en marzo de 2022.
Cientos de profesores y estudiantes se reunieron en la Universidad Central de Venezuela (UCV), la principal del país, con la intención de entregar un documento ante el Ministerio de Educación Universitaria para exigir, además de mejores salarios, becas «dignas» para los estudiantes y que se respete la autonomía universitaria, que, según denunciaron, ha sido violentada.
Sin embargo, la concentración no logró salir de la UCV, debido a la presencia de un contingente de la Policía que bloqueaba el paso, pero el documento fue recibido por el viceministro de Educación Universitaria, Ryan Rojas.
Entre los presentes estaba Gregorio Afonso, presidente de la Asociación de Profesores Universitarios de la UCV, quien criticó que no se aumente el salario y, en cambio, se otorguen bonificaciones gubernamentales a los empleados públicos de hasta 130 dólares, pagados en bolívares al cambio oficial, que no tienen incidencia en los beneficios laborales.
Indicó que las bonificaciones, que a su juicio han generado «una severa lesión de la carrera académica», «desestimulan el ascenso», ya que las escalas y tabuladores salariales quedaron prácticamente iguales para todos los docentes, tengan más o menos estudios o años de experiencia.
«Estamos reclamando, próximos al 1 de mayo (Día del Trabajador), que cese la política de bonificación salarial», manifestó Afonso, quien propuso que se tome en cuenta como parte del salario el llamado «bono de la guerra económica», de 90 dólares.
Por su parte, el presidente de la Federación de Centros Universitarios la UCV, Miguelángel Suárez, afirmó que los profesores «ganan una miseria» en comparación con el salario mundial, mientras que los estudiantes, criticó, reciben becas de cinco dólares.
«Solamente estamos exigiendo lo que nos corresponde: una educación de calidad y digna para seguirnos formando en las mejores condiciones», subrayó Suárez.
El pasado 10 de marzo, la ONG Observatorio de Universidades (OBU) afirmó que los docentes universitarios de Venezuela son los «peores pagados» en comparación con 15 países de Latinoamérica, al asegurar que el «mejor salario» de un profesor en el sector público nacional equivale a ocho dólares al mes.
En enero, un docente en Venezuela necesitó el equivalente a 36 veces su salario para pagar la canasta básica de alimentos, valorada ese mes en 476,82 dólares para una familia representativa de cinco personas, según un informe de la ONG Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas-FVM).