(EFE).- El Gobierno de Perú acordó este martes ampliar el aforo y el número de vuelos en los aeropuertos del país, habilitar cruceros y evaluó además la aprobación de un protocolo que permitirá, una vez alcanzada la vacunación universal, reabrir las fronteras internacionales en aras de reactivar el turismo.
Según informaron a través de Twitter el ministerio de Salud y el de Comercio Exterior y Turismo, los titulares de ambas carteras, Hernando Cevallos y Roberto Sánchez, respectivamente, sostuvieron este martes una reunión en la que concertaron nuevas medidas para dar aliento al turismo «de manera responsable» y reactivar la economía del país.
Entre las nuevas disposiciones figuran la ampliación del aforo y del número de vuelos en los aeropuertos regionales y el internacional Jorge Chávez, de Lima, así como la habilitación del turismo de cruceros.
Además, en el encuentro se evaluó y analizó la aprobación de un protocolo sanitario que dará luz verde a la circulación por los pasos fronterizos de la norteña región de Tumbes y la sureña de Tacna, que llevan cerrados desde marzo de 2020 cuando se inició la pandemia de la covid-19 en Perú.
«Todas las medidas se darán bajo un estricto protocolo de bioseguridad. ¡Reactivemos el turismo de manera responsable!», señaló en las redes el ministerio de Comercio Exterior y Turismo.
La voluntad del Gobierno peruano de reabrir las fronteras con los países vecinos de Ecuador y Chile, que se dará luego de la vacunación universal, ya había sido anunciada por el presidente peruano, Pedro Castillo, en agosto pasado durante la ceremonia por el 92 aniversario de la reincorporación de Tacna al país andino.
En aquella ocasión, el mandatario aseguró que se restablecería la circulación en las fronteras norte y sur una vez que termine la vacunación contra la covid-19, un proceso que hasta la fecha ha logrado inmunizar con la pauta completa al 59 % de la población objetivo en el país, que asciende a 28,24 millones de ciudadanos.
Castillo recordó que muchos peruanos de Tumbes y Tacna viven del comercio en los pasos fronterizos, aunque consideró que corresponde ser consciente de que «todo tiene que darse en su tiempo».
De hecho, la economía del 90 % de la población de estas dos regiones depende de la llegada de consumidores provenientes de los países vecinos, según detallaron los gremios empresariales de ambas ciudades, que llevan semanas cuestionando la falta de «decisión política» para reabrir las fronteras.