Redacción (ALN).- Quim Torra mantiene el desafío separatista. En la reunión que tuvo este lunes en La Moncloa con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, dijo que no renunciará a lograr la independencia de Cataluña. El encuentro entre ambos se caracterizó por el tono cortés, según afirmó el presidente de la Generalitat de Cataluña y la vicepresidenta del Gobierno español, Carmen Calvo. Las versiones ofrecidas del diálogo son, sin embargo, contradictorias.
El gobierno separatista de la Generalitat de Cataluña responde a los gestos de acercamiento de Pedro Sánchez manteniendo sus objetivos. El presidente autonómico, Quim Torra, lo dejó claro este lunes en la reunión celebrada con el presidente del Gobierno español en La Moncloa. Insistió en que la negociación tiene que ser sobre la independencia, que considera irrenunciable. Dijo que no rechaza “ninguna vía” para lograrlo.
La vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, sostuvo que el Gobierno se mantiene firme en la defensa de la Constitución. Lo que ha cambiado es el tono de la relación personal. Tanto el dirigente separatista como Calvo manifestaron que se desarrolló en un ambiente correcto.
Torra dijo que tiene “posturas divergentes” con Sánchez en lo relativo a la independencia y a la situación de los políticos separatistas encarcelados mientras se les juzga por delitos de rebelión, sedición y malversación. Como siempre, se refirió a ellos como “presos políticos”.
Quim Torra contra Felipe VI
Torra: “Todo lo que sea republicanizar España nos tendrá de su lado”
Torra no sólo mantiene el objetivo separatista, sino que además pretende cambiar la forma de Estado del país del que quiere separar a Cataluña. En una confirmación de que el rey Felipe VI se ha convertido en una de las bestias negras del separatismo, dijo que “todo lo que sea republicanizar España nos tendrá de su lado”.
El monarca es el protagonista de una gran contradicción entre la comparecencia de Torra y la de Calvo, que habló con los periodistas en vez de Sánchez. La vicepresidenta del Gobierno dijo que el presidente catalán y Sánchez acordaron preparar “de común acuerdo” los actos del aniversario de los atentados en Barcelona y Cambrils el 7 de agosto. Añadió que Felipe VI irá si se lo permite su agenda. Torra, por su parte, afirmó que “no vamos a invitar” al rey.
Otra contracción se encuentra entre los objetivos declarados de la negociación que ambos han dicho que va a comenzar a partir de este encuentro. Torra sostuvo que no se va a renunciar a la independencia porque “el derecho de autodeterminación pertenece al pueblo de Catalunya”. Afirmó que a partir de este momento el debate es cómo el gobierno español y el autonómico afrontan lo que definió como “una cuestión política”.
Discrepancias sobre la independencia
“Hemos acordado que nos encontramos en una vía de negociación política y, por lo tanto, me niego a pensar que no encontraremos una solución política a la exigencia de más de dos millones de catalanes de resolver políticamente, democráticamente y pacíficamente su derecho de autodeterminación”, afirmó el presidente catalán.
También sostuvo que Sánchez habló de “la plurinacionalidad” y defendió que España es una “nación de naciones”, si bien no concretó “cuál es su proyecto para España ni la solución al derecho de autodeterminación”.
Frente a lo dicho por Torra, Calvo aseguró que “la autodeterminación no existe como derecho en ninguna democracia, tampoco en la española”. Añadió que sobre esto “hay muy poco de que hablar”. Afirmó también que el Gobierno se mantiene firme en su defensa del “orden constitucional”.
A pesar de las profundas discrepancias, Calvo sostuvo que “Torra ha estado constructivo en aquellos asuntos que convienen que las cosas vuelvan a un espacio donde se encuentra lo razonable en la política”. Finalmente, señaló que el encuentro es “una buena imagen con contenido para la democracia y también para la situación de Cataluña y España”.