Daniel Gómez (ALN).- “Les pido humildemente unidad y lealtad”, dijo el presidente de España, Pedro Sánchez, este jueves en el Congreso. Y unidad y lealtad le prometió el líder de la oposición, Pablo Casado, aunque no sin dedicarle un buen número de críticas. “En esta crisis funciona mejor lo que no depende de usted. Le seguimos apoyando para salvar vidas, pero no para arruinar a España”.
Pedro Sánchez, presidente de España, tiene los votos del Congreso para ampliar el estado de alarma hasta el 26 de abril y enfrentar el coronavirus, pero no el apoyo político que le gustaría.
En el discurso de Sánchez ante el Congreso admitió que el gobierno no se anticipó a la crisis. “Todos hemos llegado tarde, es evidente que toda Europa ha llegado tarde. España no es una excepción. Pero España fue el primer país en tomar medidas de confinamiento en Occidente, con 120 víctimas. Es el país que mayor número de pruebas por habitante realiza. El país que más lejos ha ido en las medidas de confinamiento. El único que contabiliza todos los contagios. Toda Europa llegó tarde, pero España actuó antes. Les pido unidad y lealtad”.
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Unidad y lealtad fueron las palabras en las que más énfasis puso Sánchez. Lo hizo porque los pilares de Europa, y en consecuencia también de España, están en peligro:
– “En Europa lo extraordinario de esta emergencia exige contundencia”.
– “De lo contrario, y lo digo sin matices, nuestra unión está en peligro”.
– “Necesitamos solidaridad sin fisuras”.
– “Y la prueba fehaciente de que la cohesión es algo más que retórica”.
– “Es ahora o nunca”.
– “La reconstrucción de Europa es tan necesaria como la unidad de nuestro país”.
– “Necesitamos medidas que respalden el endeudamiento público”.
– “Hoy luchamos todos ante una misma emergencia”.
– “Es ahora cuando Europa debe ser más Europa que nunca”.
– “De lo contrario Europa se habrá olvidado de los europeos, y por ende, también de los españoles”.
Sánchez también pidió unidad para que todos los partidos políticos de España reivindiquen en la Unión Europea “solidaridad fiscal” y “unidad” para evitar recortes y medidas de austeridad. “No queremos fragilidad. Queremos fuerza, acción y unidad para todos”.
El presidente dijo: “Les invito a que defiendan España y Europa en sus grupos políticos europeos. Los partidos españoles integran partidos europeos, ejerzan la influencia en favor de España y de Europa. Es el momento de la unidad de acción, también en Europa”.
Sánchez recordó un reciente reportaje de Financial Times que decía que, aunque el coronavirus es “una emergencia global, únicamente en España ha abierto una crisis política”. Y también recordó las palabras del jefe de la oposición en Portugal, el conservador Rui Rio, y del nuevo líder del laborismo británico, Keir Starme, quienes tendieron la mano al gobierno para enfrentar la pandemia.
E insistió: “Mientras nuestros sanitarios luchan en primera línea, mientras nuestras familias están en casa, creo que debemos estar unidos, como todos. Les pido humildemente unidad y lealtad”.
La oposición sigue siendo crítica
Pablo Casado, presidente del PP y líder de la oposición en España, recogió el llamado de Sánchez. Pero advirtió: “En esta crisis funciona mejor lo que no depende de usted. Le seguimos apoyando para salvar vidas, pero no para arruinar a España”.
Casado, aunque le entregó los votos a Sánchez para que amplíe el estado de alarma sin dificultades, fue muy crítico con la actuación del gobierno. Le recordó que “España es el país del mundo con más fallecidos por millón de habitantes”. El país “con más sanitarios contagiados”.
Casado: “En esta crisis funciona mejor lo que no depende de usted. Le seguimos apoyando para salvar vidas, pero no para arruinar a España”. El líder de la oposición dijo que “siempre” estará dispuesto al “diálogo social, pero decisiones ruinosas, nunca”.
Esto lo dice porque el PP votará no al paquete económico de Sánchez. En este sentido, critica la falta de transparencia del gobierno. “No se han dignado a llamar en dos semanas a quienes les están apoyando”.
Aunque el gobierno de Sánchez convocó la próxima semana a todos los partidos, autonomías e instituciones de España para negociar un acuerdo de reconstrucción de España, al estilo de los Pactos de la Moncloa que facilitaron la transición, Pablo Casado continuó la crítica: “Nadie nos ha llamado para explicar el contenido de los decretos, el mismo ninguneo que en los anteriores, pero esos los pudimos apoyar porque eran más razonables. Difícilmente puede aspirar a reescribir la Transición quien no es capaz de negociar ni un decreto”.