Daniel Gómez (ALN).- El canciller paraguayo, Eladio Loizaga, quiere seducir al empresario español. Para ello, pone como ejemplo a las constructoras Isolux y Sacyr. La primera concluyó el viaducto de Asunción y la segunda puja por las obras de la nueva terminal del Aeropuerto Silvio Pettirossi. Por otro lado, menciona la industria alimentaria. Un sector que ofrecería múltiples oportunidades si se concreta el acuerdo UE-Mercosur.
Las relaciones diplomáticas de Paraguay con España están “al más alto nivel”. Lo dijo el canciller paraguayo, Eladio Loizaga, en el acto que celebró este martes la agencia EFE en la Casa de América de Madrid. Prueba de ello, aseguró, es la participación de la industria española en el desarrollo de infraestructuras.
En primer lugar, Loizaga citó a Isolux Corsán. El grupo español ingresó en Paraguay en 2015 con un proyecto llave en mano. Suya fue la construcción del viaducto inaugurado en marzo de este año y tildado de “histórico” por parte del Gobierno y la prensa local. Nunca antes se entregó una obra de este tipo a tiempo. Tampoco produjo sobrecostes. Se valoró en 20 millones de euros (23 millones de dólares) y con ese monto se culminó. Asimismo, es la primera vez que Paraguay incorporó tecnologías inclusivas en las carreteras, pues implantaron pasarelas metálicas con sensores para ciegos.
Sacyr es la otra firma española con intereses relevantes en Paraguay. El grupo participa en la primera licitación concesional puesta en marcha en toda la historia del país. Se trata de la ampliación del Aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi con la construcción de una nueva terminal. “Se nos está quedando chico, Sacyr forma parte del concurso, y pronto habrá resolución”, señaló el canciller.
El grupo español compite con otras dos empresas. Las especificaciones facilitadas por el Gobierno hablan de una inversión de 150 millones de euros (170 millones de dólares), que será devuelta en la fase posterior de explotación, de 30 años. El proyecto se inicia este 2017 y debe concluirse en 2019.
Además de infraestructuras, Loizaga reseñó que la industria española también tiene oportunidades en el sector de alimentos y bebidas en Paraguay. Un negocio que puede tomar fuerza -afirmó- si se concreta el acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea y Mercosur.
Paraguay está preparado para el acuerdo UE-Mercosur
Paraguay conforma, junto a Argentina, Brasil y Uruguay, el Mercado Común del Sur (Mercosur). En un acto celebrado este lunes en la Casa de América de Madrid, cuatro ministros del organismo, entre ellos Loizaga, se reunieron con la comisaria de Comercio en la Comisión Europea, Cecilia Malmström, para dar un impulso al libre comercio entre ambos lados del Atlántico. “Estoy convencido de que gracias a la cooperación de países como España vamos a llegar a buen puerto. El timing previsto [finales de 2017] es el correcto”, aseguró el ministro paraguayo.
El tratado entre la UE y Mercosur habla de un desbloqueo arancelario, así como de unificar la regulación en materia sanitaria y medioambiental. Tal como aseguró Loizaga, Paraguay está preparado para esta integración: “Las exigencias las cumplimos. Mando un mensaje de tranquilidad a la comisaria Malmström”.
“Combatir la pobreza con empleo”
En estos momentos, el país se encuentra en un proceso de expansión. El Fondo Monetario Internacional (FMI) estima un crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) de 3,3%. Sin embargo, los índices de pobreza superan el 22% en una nación pequeña, pues es una de las menos pobladas de Latinoamérica. El último censo registró 6,6 millones de habitantes.
Otra oportunidad de crecimiento para Paraguay pasa por la explotación del denominado oro verde
“Queremos combatir la pobreza con empleo. Por lo que tenemos que generar las condiciones necesarias para crearlo”, señaló Loizaga. Por ello, defendió el modelo impositivo de Paraguay. “Nuestra intención es fomentar las inversiones. Entre los países de Mercosur, nuestra estructura de impuestos es la más sencilla y eso hace que las empresas vengan”.
Otra oportunidad de crecimiento para Paraguay pasa por la explotación del denominado oro verde. El país figura como potencia en el cultivo de soja. Es el cuarto productor mundial y cuenta con empresas líderes del sector, como Los Grobo, del argentino Gustavo Grobocopatel, trabajando en sus campos de cultivo.