Redacción (ALN).- En la economía circular todo se aprovecha. Es un bucle que comienza con la elaboración de productos sostenibles y respetuosos con el medio ambiente, y que termina en el tratamiento de los desechos para que estos no castiguen a la naturaleza y puedan volverse a aprovechar. Una estrategia para el medio ambiente que sólo funciona si la aplican todos. De ahí la alianza que acaban de sellar Colombia, Costa Rica, Perú y República Dominicana.
Coalición de Economía Circular. Esta es la iniciativa que Colombia, Costa Rica, Perú y República Dominicana lanzaron este miércoles “para impulsar la transición hacia un sistema económico sostenible como parte de la recuperación post-covid”.
“El planeta ya no puede soportar nuestra manera de extraer, usar y desperdiciar recursos. Es urgente construir una visión regional común sobre la economía circular. La coalición que lanzamos ayudará a hacer precisamente eso y a implementar prácticas concretas y medibles”, dijo el ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Colombia, Carlos Correa, quien ejercerá de presidente de la coalición.
El proyecto lo lanzan junto al Programa para el Medio Ambiente de Naciones Unidas, Pnuma. El director para América Latina de esta agencia, Leo Heileman, apuntó que “la creación de esta coalición reafirma el compromiso de la región con la implementación de la Agenda 2030 a través de la promoción de la innovación, la infraestructura sostenible y una economía inclusiva y circular”.
“Es tiempo de reconocer que los patrones de producción y consumo son la causa fundamental de la triple crisis planetaria del cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación. Aprovechemos esta oportunidad única para repensar nuestra economía lineal y reconfigurar esos patrones insostenibles”, agregó el jefe regional de Pnuma.
Los objetivos de la coalición
La idea de estos cuatro países es crear “un modelo económico resiliente, diverso e inclusivo”. Que elimine de Latinoamérica la mentalidad de “tomar, fabricar y desechar”.
Y es que en la economía circular todo se aprovecha. Los productos se hacen con materiales sostenibles. Los procesos no impactan a la naturaleza, sino que la ayudan. Y el deshecho de los productos ya no es una opción. Los restos se reciclan y se les vuelve a dar una vida útil. Así se genera el bucle de la economía circular.
Otro de los objetivos de la coalición es “fomentar la productividad económica a largo plazo y los empleos verdes, a la vez que hace frente a desafíos mundiales como el cambio climático, la contaminación y la pérdida de biodiversidad”.
También ponen el foco en el sector privado. En particular en las pequeñas y medianas empresas, las cuales podrán “acceder a un financiamiento adecuado, con el fin de promover la movilización de recursos para la innovación e implementación de productos específicos”.
Colombia, Costa Rica, Perú y República Dominicana contarán con el apoyo de ocho socios estratégicos: además del Pnuma, el Centro y Red de Tecnología del Clima, la Fundación Ellen MacArthur, el Banco Interamericano de Desarrollo, la Fundación Konrad Adenauer, la Plataforma para Acelerar la Economía Circular, la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial y el Foro Económico Mundial.